FALGBT manifestó su repudio por la cesantía de una agente lesbiana de la Policía de Córdoba, tras solicitar licencia por maternidad de su esposa. Además, exigieron su urgente restitución y el retiro inmediato de las sanciones.
La Federación Argentina de lesbianas, gays, bisexuales y trans (FALGBT) y su organización La Fulana, manifestaron su repudio por el hostigamiento y pase a disponibilidad de una agente lesbiana de la Policía de Córdoba, sin apercibimiento de haberes, luego de haber solicitado la licencia por maternidad de su esposa.
Además, exigieron al gobierno provincial su urgente restitución y el retiro inmediato de las sanciones.
La agente en cuestión, Carina Villarruel, y su esposa habían protagonizado el primer matrimonio igualitario entre mujeres en esa fuerza de seguridad.
"No podemos permitir que se nos siga hostigando en los trabajos y menos aún si son dependencias estatales. Repudiamos enérgicamente que el derecho a reclamar sus derechos sea considerado un acto de rebeldía", frase con la cual denominó la fuerza policial la denuncia realizada por Carina ante el INADI, expresó un comunicado.
"Estas medidas dejan a la luz las políticas sexistas, heteronormativas y misóginas que aún rige en las fuerzas y que evidencian un grave acto discriminatorio hacia el colectivo de lesbianas", apuntó la entidad.
"Exigimos la inmediata reincorporación, pago de los haberes adeudados y reconocimiento de su familia por parte de la fuerza", continuaron.
Carina Villarruel, quien contrajo matrimonio con Soledad Ortiz en febrero de 2013, denunció que fue suspendida en sus funciones por sus reiterados pedidos para que le concedieran una licencia por maternidad, debido a que su pareja acaba de dar a luz.
"Esto es discriminatorio. Si hubiese tenido un hijo con un hombre esto no habría pasado", dijo a la prensa Villarruel, que en enero no percibió suma alguna de sueldo porque, afirmó, las autoridades la suspendieron "por supuesto abandono de trabajo".
El 27 de enero la mujer de Villarruel dio a luz a Umma, razón por la cual la agente de policía solicitó licencia por maternidad, pedido que, según Villarruel, desde la Jefatura de Policía, "nunca" le contestaron porque no sabían si le correspondían "los seis meses reconocidos a la madre gestante o los tres días que le corresponden al padre varón".
Martín Berrotarán, titular del Tribunal de Conducta de la Policía, aseveró que la situación generada "no se vincula en absoluto con la vida privada de Villarruel". (Télam)
