Ronald Poppo quedó ciego y con su cara mutilada, vive en un centro médico y aseguró que no quiere más cirugías "porque van a doler". Al atacarlo, su victimario le dijo: "vas a ser mi esposa y este va a ser un concierto de amantes"
El 26 de mayo pasado, hace más de siete meses, Ronald Poppo sufría un brutal ataque en la MacArthur Causeway, cerca del centro de Miami. Rudy Eugene, un hombre de 31 años que venía desnudo, empezó a morderlo en la cara, dejándolo mutilado y ciego. Hoy vive en un centro médico de South Miami-Dade, no da entrevistas a la prensa y no le permite a los doctores hablar sobre su condición médica.
El terrible crimen le permitió al hombre de 65 años, que vagabundeaba por la ciudad, ponerse en contacto con familiares. Antoinette Poppo, su hermana, aseguró que está feliz en el lugar donde ahora reside.
Según Antoinette, su cara aún no se ha curado. Sin embargo, no quiere más cirugía porque "va a doler".
"No habla mucho. Dice: 'cuidate'. Es tan triste que no pueda ver y que tenga que depender de otras personas", declaró Poppo al Miami Herald.
De pequeño, Poppo vivía con su familia italiana en Brooklyn, Nueva York. De pequeño tocaba el violín, cambiándolo por la guitarra eléctrica en su adolescencia. Se separó de su familia a principios de la década de 1970 y desde entonces vagaba por las calles de Miami.
En agosto pasado, en declaraciones a detectives divulgadas por el canal local CBS4, aseguró que el agresor lo atacó brutalmente, sin que él lo provocara. Dijo que le arrancó "la carne en tiras" y le "sacó los ojos", al tiempo que gritaba que ambos morirían. Fuente: (AP).
