Soledad Pastorutti es una de las referentes del folklore en Argentina por su aporte a la música popular durante sus casi 30 años de carrera.
Acostumbrada a usar sus redes sociales para exponer detalles de su vida artística, desde hace algunas semanas, la cantante de 44 años comenzó a realizar una serie de videos especiales donde invita a conocer las historias que se esconden detrás de las canciones.
“Alguna vez te preguntaste qué historia se esconde detrás de una canción? Hay lugares, personas, emociones; una canción, una historia”, indica en el posteo donde vuelca todo su conocimiento sobre el mundo del folklore a tal punto de que sus fanáticos la llaman "la profesora", destacando esta faceta pedagógica suya.
En uno de los últimos posteos publicados, La Sole profundizó en torno a “Por las costas entrerrianas”, la canción de Horacio Guarany, que celebra la belleza y la riqueza de la provincia de Entre Ríos, especialmente sus costas sobre el río Paraná. La canción evoca paisajes, sentimientos y experiencias asociadas a esa región.
La cantante cuenta que Horacio Guarany recorría el río Paraná a bordo su barco, que llamaba el chiqui y al pasar por el norte entrerriano lo visitaba a Linares Cardozo, “un gran poeta y cantor. Y en homenaje a su amigo es que compuso Por las costas entrerrianas”.
Mate en mano, La Sole entona la última parte de la canción que dice:
Con el caballo cuateao viene Linares Cardozo
nadando hasta el Paraná y el alma llena de gozo,
cuando lo veo pasar de arriba de la barranca
suelo chiflarle demás para que me lleve en ancas
“Esta canción tiene río”, dice la cantante y finaliza diciendo que cuando dos poetas como Guaraní y Cardozo se encuentran no podemos pedirles más que canciones.
La letra de “Por las costas entrerrianas”
Fulgor del amanecer por las costas entrerrianas,
cruzando el Gualquiraró casi llegando a Corrientes,
se siente la sensación de estar viviendo en el cielo,
con una dulce mujer que nadie pudo igualarla.
Verdores del saucedal que el agua va acariciando,
allá pasa un pescador que va en la popa bogando,
y canta mi corazón porque no existe en el mundo,
una fortuna mayor que estar volviendo a esos pagos.
Y pienso chamigo qué linda es la vida,
qué linda mi tierra y mi gente también,
y pienso en el Yoyi, en Claudia y en Carlos
y el Pelao Lezcano que no olvidaré.
Amigos del alma que alegran la vida
y me dan la fuerza para no aflojar
y gritarle al mundo en un mano a mano
paraíso entrerriano ciudad de La Paz.
Cuando salgo a recorrer esos ríos de mi tierra,
suelo llorar sin querer por la belleza que encierra,
me embarga una honda emoción por ese amor a mi tierra,
y si encuentro una mujer soy como el indio en la guerra.
Con el caballo cuateao viene Linares Cardozo
nadando hasta el Paraná y el alma llena de gozo,
cuando lo veo pasar de arriba de la barranca
suelo chiflarle demás para que me lleve en ancas