La segunda edición de la caminata “Jóvenes de Corazón” convocó este sábado a más de 200 personas en el Parque Gazzano, donde desde las 9 de la mañana vecinos y adultos mayores se sumaron a la propuesta recreativa organizada por el gimnasio Taian. La jornada incluyó una entrada en calor, recorridos de distintas distancias y actividades pensadas para promover el envejecimiento activo.
Uno de los coordinadores informó que “terminamos la entrada en calor y comienza la caminata, segunda edición de Jóvenes de Corazón”. En ese sentido, explicó que había tres alternativas de recorrido: “Es una vuelta al lago, dos para los que están más entrenados y una más reducida para quienes tienen ciertas condiciones”.
Remeras, medallas, hidratación y sorteos
La organización destacó el alcance de la actividad. “¿Cuántos participantes? Más de 200. Regalamos remera, medalla, frutas, hidratación y tenemos sorteos para el final. Cerramos con Zumba y Ritmos”, señaló la coordinadora del evento, Andrea Sanfilippo.
Además, subrayó la importancia del trabajo sostenido con los adultos mayores. “Estamos felices. Hoy no hay sol, pero nuestro rayito de sol son ellos. Siempre se ha trabajado para los adultos mayores y seguimos haciéndolo”, afirmó. Además, remarcó: “Queremos fortalecer este envejecimiento activo, porque es muy importante la actividad para ellos”.
El ambiente en el Parque Gazzano fue de entusiasmo y acompañamiento. Participantes de distintas edades se prestaron al intercambio con Elonce antes de la largada. Algunos destacaron: “Va a estar hermoso, cuando preparan esto hay que venir”; otros afirmaron: “Estamos de diez, listos para caminar”; mientras que un grupo celebró la oportunidad de compartir la mañana: “Ayer estuvimos en Oro Verde y hoy vinimos con amigos a participar”.
Familias completas también se sumaron a la propuesta, muchas de ellas acompañando a adultos mayores en el recorrido y aprovechando el clima templado. “Toda la familia va con agüita en mano”, comentó una participante entre risas.
La caminata largó entre aplausos, saludos y música, con la energía característica de las actividades grupales al aire libre. El cierre estuvo marcado por una clase de Zumba que reunió nuevamente a los presentes para despedir la jornada con baile y alegría.