Pese al partido de la Selección Argentina, Gran Hermano tuvo su gala este martes en un horario especial, en el que hubo hasta prueba del líder y un “Congelados” muy particular en el que desvalijaron la casa. La edición fue una de las más inusuales de la temporada y dejó a los fanáticos sorprendidos por el desarrollo de los hechos dentro del reality más visto de la televisión argentina.
En medio de la cuenta regresiva hacia la final, los seis participantes que aún permanecen en la casa enfrentaron la última prueba de liderazgo y una inesperada intervención de la producción. Con la última eliminada Katia en el debate, la casa vivió un por demás extraño “Congelados”: los seis participantes quedaron inmóviles por un sorpresivo ingreso.
No fueron exparticipantes ni familiares en esta ocasión. Los jugadores recibieron la visita de “encapuchados” de la producción, que literalmente desvalijaron la casa. El momento generó desconcierto tanto entre los participantes como en los televidentes, que siguieron en vivo cómo se retiraban sillones, electrodomésticos y objetos personales sin que nadie pudiera reaccionar.
La casa, vacía y en silencio: una nueva prueba para los finalistas
De esta forma, la vivienda se quedó sin muebles y todo tipo de elementos, en lo que parecer ser otra prueba que deberán superar los últimos seis jugadores. Esta intervención sin precedentes busca, según señalaron fuentes cercanas a la producción, llevar al extremo la convivencia en la recta final del programa. Los espectadores, por su parte, colmaron las redes sociales con teorías y reacciones.
Mientras tanto, la prueba del líder volvió a poner en juego una ventaja estratégica clave en la semana final. Se trató de la última competencia de liderazgo de la edición, teniendo en cuenta que son seis los jugadores que quedan en la casa más famosa del país. Con la presión acumulada por los meses de encierro, cada competencia se vive con máxima intensidad.
En lo que fue una definición mano a mano entre Juan Pablo y Ulises, finalmente el politólogo cordobés se quedó con el liderazgo tras consagrarse en una competencia de preguntas por aproximación. La dificultad de la prueba exigía tanto conocimiento como cálculo, y Ulises supo aprovechar su momento para imponerse.
Ulises, con ventaja en la última gala de nominación
Desde hace unas semanas, ya no hay inmunidad como premio. Sin embargo, Ulises obtuvo votos dobles de cara a la gala de nominación de este miércoles, que también será la última de la edición. Esta ventaja podría ser determinante para definir quiénes llegarán a la gran final y pelearán por el premio mayor.
La competencia, que entra en su etapa decisiva, ha incrementado la tensión dentro de la casa. Con menos comodidades, menos margen de error y decisiones clave por tomar, los jugadores se enfrentan a los días más intensos del encierro. El público, por su parte, se mantiene expectante, votando, opinando y proyectando posibles ganadores.
Así, Gran Hermano volvió a demostrar su capacidad para reinventarse en cada gala, combinando sorpresas, estrategia y emociones fuertes en un formato que, tras años al aire, sigue capturando la atención de millones.