Marcelo Gallardo mostró su frustración y su constante autocrítica en la conferencia de prensa posterior a la derrota de River Plate en la final de la Supercopa Internacional ante Talleres de Córdoba. Luego de caer en una tanda de penales, el entrenador señaló que, para ganar, el equipo necesita “una energía y creatividad que nos estuvo faltando”. Con un rendimiento bajo durante los 120 minutos de juego, el técnico reconoció que su equipo no estuvo a la altura de las expectativas.

Gallardo también hizo hincapié en que en esta final se encontraron con “tres obstáculos”: el rival, el clima y ellos mismos. A pesar de que River no generó muchas situaciones de peligro, el técnico asumió con claridad la responsabilidad por los problemas que su equipo enfrenta en este inicio de temporada. Sin embargo, se mostró confiado en que “con trabajo e insistencia” el panorama puede mejorar y el equipo volverá a su mejor versión.

A pesar de los resultados negativos, Gallardo destacó que es importante no solo juzgar a su equipo por los resultados, sino también reconocer que “hace bien una parte del trabajo”. En particular, resaltó la solidez defensiva, indicando que River “no recibe muchos goles ni sufre demasiado” en esa faceta.

Análisis sobre el presente de River

En cuanto a los resultados adversos que ha enfrentado en este segundo ciclo como director técnico de River, Gallardo optó por mantener la calma. “Es demasiado prematuro para generarse dudas, pero este inicio de año es inesperado", expresó, aunque reconoció que el equipo debe “hacerse cargo y resolver situaciones con otra preponderancia”. En su opinión, es clave tener “personalidad para reponerse de este mal arranque” y mejorar lo que no está funcionando.

Con 14 años de experiencia como entrenador, el “Muñeco” se mostró consciente de los desafíos que siempre surgen en su carrera y admitió que “no es nada que desconozca” pasar por momentos difíciles. Al ser consultado sobre posibles cambios, Gallardo dejó claro que, si es necesario, se hará: “Si hay que cambiar, hay que cambiar”, explicó, añadiendo que nunca ha sido rígido respecto a sus sistemas y formas de juego.

A pesar de la situación actual, Gallardo no dejó de resaltar los elementos que marcaron la identidad de River durante su primer ciclo, especialmente el concepto de ser “un equipo agresivo y que imponga las condiciones del partido”. Para él, eso sigue siendo clave, y cree que con trabajo se puede retomar ese estilo que caracterizó al equipo en sus años más exitosos. Al final de la conferencia, Gallardo cerró con una reflexión sobre su rol al frente del equipo: “Soy autocrítico y exigente”, admitiendo que la situación actual “claramente es incómoda”. Sin embargo, se mostró esperanzado en que, con esfuerzo y dedicación, podrá devolverle al hincha de River la representatividad que merece. (Con información de Noticias Argentinas)