José Silverstein es un zapatero de Paraná que se dedica a confeccionar, de manera artesanal, calzados talles grandes. Se trata de los zapatos y zapatillas que usualmente no se comercializan en las zapaterías tradicionales. El hombre es el dueño de la zapatería “Pie Grande”, ubicada en Avenida de las américas al 2.580, en la zona sur de la ciudad y en diálogo con Elonce detalló que “es un oficio que no abunda”.
“Los zapatos chicos se consiguen hasta en kioscos, en cambio a los números grandes no, es una odisea hallar un par”, dijo el zapatero a Elonce al asegurar que el mercado de “los pies grandes” es muy chico: “Si te dedicas a esto sí o sí debes hacer otra cosa para subsistir, pero me gusta saber que con esto ayudo a alguien”, aseveró.
Silverstein comenzó con el oficio cuando tenía apenas ocho años. “Fue un verano, cuando al terminar las clases quise tener un trabajito para entretenerme y pasaba días mirando la vidriera de una fábrica de calzado, hasta que un hombre me hizo pasar y me enseñó algunas cosas”.
Según recuerda el zapatero, en un primer momento se dedicó a realizar arreglos y tareas menores en el lugar, luego comenzó a fabricar zapatos por su cuenta: “no me salían, siempre me quedaban torcidos y un día una mujer me dijo que estudie diseño industrial para aprender técnicas, y eso hice y me sirvió muchísimo”.
Al consultarle por su trabajo, dijo que lo hace de manera artesanal: “primero se hace el plano, luego se cortarlas partes y posteriormente se cosen las piezas en un material descartable; esto es para que la persona se pruebe y si queda cómodo se repite el proceso, pero en cuero”.
En este sentido, destacó que “es una ayuda psicológica para los clientes porque resulta muy complejo conseguir calzado de talles grandes” y recordó que “un joven hace unos días me comentó que le llevó siete meses recorriendo ciudades para conseguir calzado y me compró tres pares”.
El trabajador, con machismos años detrás del mostrador, reveló que “a los clientes los entiendo, con mirarlos a los ojos se los que les pasa, resulta difícil que algo tan esencial como el calzado se les dificulte”.
En esta ocasión, el profesional del calzado dijo que la demanda es alta y es “pareja entre modelos femeninos y masculinos”. Además, rememoró que uno de los talles más grandes que ha hecho fue un par Nº 56, 11 talles más que la medida estándar-