"Una foto del día 28 de septiembre demuestra que es el barco (Tunante II), a unos 360 kilómetros de la costa de Brasil, por debajo de donde termina el Golfo de Santa Catarina. Esa foto la saca la empresa Digital Globe. No es un velero más, es el barco, por las características que tiene", dijo Tomás Vernero, hijo del cardiólogo Alejandro Vernero, uno de los náufragos.

"Arriba de ese barco uno puede estar meses. Ellos tenían potabilizador para el agua y artículos de pesca", dijo hoy Tomás Vernero en diálogo con radio América.

E insistió con que "la falta de contacto" puede responder a que "los teléfonos satelitales se cargan con la batería del barco y, si se moja, no hay forma de hacerla funcionar nuevamente". "Se va a dar a conocer la foto para que Brasil reanude la búsqueda, pase de la búsqueda pasiva a una búsqueda activa. Ellos nos garantizaron que, ante un indicio de vida, iban a reanudar la búsqueda", concluyó Vernero.

<i>La búsqueda</i>

El 14 de septiembre, Brasil suspendió la búsqueda activa de los náufragos, pero Argentina decidió continuar en la zona con buques y aviones.

Hoy, tras el anuncio de los familiares, la Marina del país vecino reanudó la búsqueda, según lo confirmó el Ministerio de Defensa, que conduce Agustín Rossi, este mediodía.

Asimismo, el ministro Rossi instruyó a la Fuerza Aérea Argentina poner a disposición de las autoridades brasileñas un avión Hércules C-130, a fin de que realice vuelos de exploración en la zona de Florianópolis; y a la Armada mantener un buque en las áreas de búsqueda, como lo viene haciendo en forma ininterrumpida hace 44 días.

<i>La desaparición</i>

El cardiólogo Vernero, de 62 años, Jorge Benozzi, de la misma edad; su yerno Mauro Capuccio, de 35; y Horacio Morales, de 62, apodado "El Mono", los cuatro argentinos, partieron el 22 de agosto en el Tunante II desde el puerto bonaerense de San Fernando con destino a Río de Janeiro y quedaron a la deriva el 26 del mismo mes, cuando fueron sorprendidos por un temporal.