El caso Solange Musse, que conmovió a la Argentina en plena pandemia, volvió al centro de la escena tras conocerse el fallo judicial. Este lunes, un jurado popular absolvió a los dos funcionarios cordobeses acusados de haber impedido el ingreso de Pablo Musse a la provincia para despedirse de su hija, quien falleció en agosto de 2020 mientras luchaba contra un cáncer de mama en etapa terminal.
El veredicto generó profunda indignación en la familia Musse y reabrió un debate público sobre los excesos en la aplicación de restricciones sanitarias durante la cuarentena por COVID-19. “Siento bronca y odio, lo mismo que sentí cuando no me dejaron ver a mi hija. Seguimos sin justicia”, expresó Pablo Musse, visiblemente afectado al salir del tribunal. Además, aseguró que apelará la decisión.
Una historia que conmovió a todo el país en 2020
El caso Solange Musse se remonta a los días más estrictos de aislamiento por la pandemia. En agosto de 2020, Pablo Musse emprendió un viaje desde Plottier, Neuquén, hacia Córdoba, con la esperanza de acompañar a su hija en sus últimos días de vida. A pesar de contar con los permisos de circulación requeridos, fue detenido en un control sanitario en Huinca Renancó.
En ese momento, las autoridades exigieron un PCR negativo para permitir el ingreso a la provincia. Aunque a Musse se le realizaron test rápidos que arrojaron falsos positivos, se le negó la entrada y fue escoltado por patrulleros de regreso a su ciudad. No se le permitió ni siquiera detenerse a descansar o alimentarse durante el viaje de regreso.
Cinco días después, Solange murió sin poder abrazar a su padre. Su carta, escrita poco antes de fallecer, donde expresaba que “hasta el último día tengo mis derechos”, se viralizó en redes sociales, generando un fuerte impacto emocional en la sociedad y críticas a las políticas sanitarias. (Con información de TN)