El Gobierno nacional confirmó que los jubilados y pensionados que perciben la mínima cobrarán en septiembre un nuevo bono extraordinario de $70.000. Así quedó establecido en el Decreto 613/2025, publicado este jueves en el Boletín Oficial con las firmas del presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y la ministra de Capital Humano Sandra Pettovello.
La decisión fue anunciada tras el blindaje que consiguió el oficialismo en la Cámara de Diputados al veto presidencial contra la suba jubilatoria impulsada por la oposición. Ese proyecto proponía llevar el refuerzo a $110.000 con actualizaciones periódicas ligadas a la inflación, pero finalmente quedó congelado en $70.000.
Críticas al congelamiento del refuerzo
En diálogo con Elonce, la abogada previsional Andrea Falconi consideró que la medida genera incertidumbre. “Es un arma de doble filo cuando decimos que vamos a entregar algo y no damos claridad, porque la situación de los jubilados es muy compleja, con haberes mínimos de 320.000 pesos más el bono, en un contexto donde la canasta básica supera 1.200.000 pesos”, señaló.
La especialista sostuvo que “cada vez que se menciona que les vamos a dar algo, están ahí con esa expectativa. Creo que hay que ser muy claros, concretos y anunciarlo cuando se tienen los números”.
Falconi también destacó que “la ley de movilidad es positiva porque prevé un ajuste mensual por inflación, pero en este empalme se confiscó más del 8% a los jubilados. Además, el bono está congelado hace más de un año y medio en 70.000 pesos, cuando debería superar los 140.000”.
Reclamos federales y crisis del sistema previsional
La abogada advirtió que el escenario es más amplio que el de la ANSES. “En el país hay 5,7 millones de jubilados que cobran alrededor de 6,9 millones de beneficios, porque algunos perciben jubilación y pensión. Las cajas provinciales no transferidas y las profesionales, como la de médicos, también están en crisis”, remarcó.
En ese sentido, planteó que falta una mirada federal: “No es solo la caja nacional la que está en problemas. Este es un sistema que requiere una solución transversal, con participación de las provincias. Cuando no se encara una reforma previsional, los efectos del cambio demográfico impactan en todos, no solo en Buenos Aires”.
Hacia un debate de fondo
Falconi concluyó que el sistema debe ser reformulado. “Hoy tenemos menos jóvenes aportando y más adultos mayores que cobran. El esquema está desvirtuado y, sin una discusión seria, seguimos en la coyuntura. Se necesita poner este tema en agenda y avanzar hacia un nuevo sistema previsional sostenible en el tiempo”.
De esta manera, mientras el Gobierno ratificó el pago del bono extraordinario de $70.000 en septiembre, persisten los cuestionamientos sobre la suficiencia de la medida frente a la pérdida del poder adquisitivo de los adultos mayores.