Sociedad Elonce en Gualeguay

“Cuando baja el agua también es atroz”: Gualeguay necesita donación de lavandina

Elonce registró en testimonios cómo trabajó la comunidad educativa para ayudar a las familias damnificadas por la inundación y cómo continúa la asistencia a los afectados. Necesitan donaciones de lavandina y desinfectantes.
“Cuando baja el agua, también es atroz”, coincidieron desde la Escuela Nº67 de Gualeguay. Elonce registró en testimonios cómo se trabajó para ayudar a las familias damnificadas por la inundación y cómo continúa la asistencia a los afectados.

“Trabajamos todos juntos y en red”. Así lo aseguró a Elonce la directora del establecimiento educativo, Analía Manso. “Envíe un mensaje a los grupos de WhatsApp en el que pedía ayuda y, automáticamente, todos se pusieron a disposición: juntamos ropa y la llevamos al Club Quilmes porque una docente es el nexo y así sabemos que nuestros alumnos y sus familias van ahí a buscar lo que necesiten, además de las viandas de los guisos comunitarios que allí preparan por la noche”. “En la escuela, el viernes y ayer al mediodía entregamos más de 200 viandas. Las cocineras estuvieron a disposición de los clubes y en los barrios Evita y Dunat, donde fueron a cocinar y colaborar. Todo el equipo directivo estuvo a disposición para lo que se necesitó”, sentenció la directora.
“Con las familias estuvimos en permanente contacto, conocemos a las familias y a cada uno de sus integrantes, les preguntamos qué necesitaban y muchas vecinas trajeron tápers para llevarles comida”, repasó Manso al lamentar que “hay docentes que perdieron todo, con todo el esfuerzo que implica adquirir muebles y demás”. “Fue una situación chocante, que te sensibiliza, pero siempre a disposición”, remarcó.

“A las familias las hacemos pasar a la escuela, para que no tengan que hacer fila para esperar por su vianda; les preguntamos qué necesitan y las orientamos respecto de dónde estamos llevando las donaciones; también ofrecemos ayuda a las familias que no pueden salir de sus casas, a través de los jeeperos para que ellos, que tienen la movilidad para llegar a esos barrios, puedan acercarles las donaciones”, explicó la directora de la escuela.
La cocinera, Jimena Badaracco, quien hace siete años presta servicio en esa institución educativa, contó cómo prestó colaboración durante las inundaciones que afectaron a Gualeguay. “Los gurises se fueron el jueves, pese a la tormenta, con la panza llena y algo calentito; a la noche, cociné en Club Central; el viernes, otra vez en la escuela y por la noche colaboré para preparar la merienda y la cena en el merendero Los Peques de barrio Evita. Siempre solidarizándonos con la gente, llevamos agua y ollas, juntamos donaciones", repasó.

En la oportunidad, la cocinera reiteró el pedido por donaciones de lavandina y desinfectantes. “Está bajando el agua y ahora se viene la limpieza y desinfección porque esa agua tiene desechos de todo tipo; y cuando baja el agua, también es atroz”. “Es un desastre por el barro y el bicherío”, completó la directora.
“La gente de Gualeguay es muy solidaria y fue la que salvó a muchos porque los comerciantes y los clubes se pusieron a disposición desde el primer día para llevar comida y elementos de limpieza”, recalcó Badaracco.

Por su parte, la secretaria escolar, Ana Carrara, cuya familia se encuentra incomunicada en Galarza por los caminos cortados, expuso: “El trabajo sigue porque hoy comienzan a surgir nuevas necesidades: lo primero era comunicarnos y entregar viandas, pero ahora necesitamos ropa y artículos de limpieza para asistir a esas familias”. “La escuela estuvo y está abierta para todo lo que se necesite y contemplando la situación de los docentes que viven lejos”, destacó.
Finalmente, la directora agradeció a las familias de sus alumnos por elegir a la Escuela Nº67 para enviar a sus hijos a clases “porque no seríamos sin ellos”. (Elonce)

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