Paraná La idea oficial es recuperarlo

Un privado alambró terreno en el Parque Varisco y generó inquietud en los vecinos

Hace por lo menos 20 días se comenzó a alambrar una zona del Parque Humberto Cayetano Varisco que hasta entonces era de uso público. Hoy se puede observar todo un perímetro de 2.500 metros cuadrados aproximados, que están delimitados.

10 de Noviembre de 2013
Uno

El hecho despertó la inquietud de numerosos vecinos. Según se pudo conocer, a partir de que la Municipalidad compró esos terrenos, le pertenecen a todos los paranaenses y a quien visite el lugar. Sin embargo, desde el área de Infraestructura se señaló que hay varios predios de dominio particular en el lugar, pero que se trabaja para recuperarlos.

La zona alambrada está ubicada en el corazón del Parque, en una calle interna lindante a Anacleto Medina, accediendo por Coronel Manuel Navarro.

Carlos Menu Marque, quien fuera secretario de Obras Públicas, de Planeamiento y Medio Ambiente de la Municipalidad de Paraná durante las gestiones radicales desde 1995 hasta 2003, época en la que se adquirió y se hizo el Parque, dijo: “Cuando se compraron esas hectáreas, lo único que se vendió fue el terreno para el supermercado. Con esa plata se hizo el mástil y calles. A la compañía que era dueña de la zona se le dejó una reserva porque no sabían si iban a seguir explotando la cantera”. Asimismo Menu Marque agregó: “En toda esa franja, que es como una lengua muy larga lindera con el terreno que vendió la empresa, no hay privados”.

Además explicó que al momento de adquirirse todo el predio, los márgenes llegaban hasta el Arroyo Antoñico y la calle Anacleto Medina se donó a Tránsito Público. “Esas casas que están ahí quedaron incorporadas”, destacó.

Lo que se observa, es un alambrado de unos 50 metros o más en un rectángulo que luego ingresa en una zona de árboles donde se pierde de vista el cerco y no permite poder conocer las medidas exactas.

Al costado de Anacleto Medina sobre la margen del arroyo, donde hoy hay viviendas, eran años atrás, fracciones de terreno por donde pasaban quienes querían llegar hasta la fábrica de cerámicos.

“Esa zona lindera eran fracciones en litigio y eran de la cooperativa, capaz del sindicato de ceramistas, que quedaron cortados por la traza y a título perfeccionado desde hace 15 años. El resto eran ocupaciones de hecho”, explicó Menu Marque.

Como sea, en principio no hay explicación para fundamentar que alguien alambre una zona del Parque que hasta hace 20 días era para uso de todos. La controversia está abierta y se prevé que siga.

 

Hay mensuras independientes

Como contrapunto, desde la Municipalidad de Paraná se señaló que hay sectores del Parque Humberto Cayetano Varisco que tienen dueño y que se trabaja para que sean de uso público.

“En el sector hay algunos predios de domino particular que como no estaban delimitados, parecen formar parte del Parque pero son mensuras independientes con dueños particulares”, dijo Abelardo Llosa, subsecretario de Infraestructura.

De todos modos agregó que desde el Municipio se aborda la situación para recuperar el espacio y que este sea para el domino publico.

“No es sencillo porque requiere de intervenciones legales”, destacó.

Señalo además que la recuperación de esos terrenos para que se puedan disfrutar por todos, es parte de un lineamiento político.

“Es un tema que la intendenta lo ha tomado y se busca que esos espacios se consoliden como predios públicos por convenios o por acción judicial de reclamos. La idea es que pasen a formar parte del dominio público. De todos modos no se resuelve de un día para otro”, remató en declaraciones a diario <i>Uno</i>.

 

Área natural protegida

Con la incorporación del Parque Humberto Cayetano Varisco, el dominio de la ciudad ganó 100 hectáreas en un espacio pensado como educativo, recreativo, paisajístico y turístico.

El Mástil de la Bandera que se erige en él, fue inaugurado el 9 de julio de 1999. La zona además fue declarada área natural protegida por ordenanza promulgada en diciembre de 2007.

Todo ese gran territorio que hoy le pertenece a los parananeses, fue en su momento parte de la cementera Loma Negra de la empresaria Amalia Lacroze de Fortabat.

La vegetación autóctona, el entorno natural y la altura elevada de la barranca permiten una de las mejores vistas de la ciudad y del río. Revaloriza además a Paraná, como ciudad ribereña.