El piloto brasileño de Fórmula 1600, Eduardo Imamura, falleció el pasado sábado en un trágico accidente cuando viajaba con su esposa y su hijo de siete años por la Transbrasiliana, cerca de Marília. La camioneta en la que viajaban colisionó frontalmente contra un camión, y la muerte de Imamura fue instantánea. El niño, gravemente herido, también perdió la vida tres días después, el martes.

Imamura conducía una camioneta blanca que, por razones aún en investigación, invadió el carril contrario y chocó contra el camión que venía en sentido opuesto. Un video captado por una cámara instalada en la cabina del camión muestra claramente el momento del impacto, en el que la camioneta quedó completamente destruida.

De acuerdo con el sitio G1, Eduardo fue declarado muerto en el lugar del accidente, mientras que su hijo Bento fue trasladado al Hospital de Clínicas de Marília en estado crítico. Lamentablemente, el niño no sobrevivió a sus heridas y falleció el martes, tres días después de la tragedia. "Luchó con valentía estos últimos días, pero ahora descansa en los brazos de Dios, junto a su querido padre, Eduardo. Que encuentren juntos la paz eterna", expresó la familia en un emotivo posteo en redes sociales. El pequeño había cumplido años apenas una semana antes del accidente.

Aline, la esposa de Eduardo y madre de Bento, solo sufrió heridas leves en el accidente. A través de sus redes sociales, expresó su profundo dolor: "Mis eternos amores, siempre estaremos juntos, nada me separará de ustedes, los amo más allá de la vida", escribió. Además, en el vehículo viajaba otro pasajero cuya identidad y estado de salud no fueron revelados.

El cuerpo de Eduardo Imamura fue sepultado el domingo por la tarde, mientras que el sepelio de su hijo Bento se realizó el martes en el Cementerio de Saudade, en Marília (San Pablo). El conductor del camión involucrado en el accidente fue interrogado por la policía, pero quedó en libertad. Las autoridades registraron el caso como homicidio culposo y lesiones corporales en la conducción de un vehículo.

Imamura: un piloto apasionado por los desafíos

En sus redes sociales, Eduardo Imamura se definía como “piloto, empresario y apasionado por los desafíos”. Desde 2018, comenzó a competir en la Fórmula 1600, una categoría en la que se destacó rápidamente. En 2021, se coronó campeón de la LDA de San Pablo, y en 2023 logró ganar la Copa de Brasil. Además, era un entusiasta del motocross y compartía con sus seguidores su amor por el automovilismo y las motos.

En sus publicaciones, también solía compartir momentos junto a su familia, con quienes estaba muy unido. La trágica pérdida de Imamura ha conmovido profundamente a sus seguidores y colegas del mundo del automovilismo.

El tributo de compañeros y amigos de pista

La comunidad de pilotos de Fórmula 1600 ha expresado su tristeza y solidaridad ante la muerte de Imamura. João Guimarães, también piloto de la categoría, manifestó en sus redes sociales: “El automovilismo no sólo ha perdido a un piloto talentoso, sino a un querido amigo”. Y agregó: “Tuve el privilegio de conocerlo y considerarlo amigo. Su ausencia se sentirá profundamente en Interlagos y en todos los demás lugares donde brilló su pasión por el automovilismo”.

El equipo San Race, con el que Imamura compitió en las temporadas 2023 y 2024, también rindió homenaje al piloto: “Sentimos profundamente esta pérdida y ofrecemos toda nuestra fuerza y solidaridad a la familia, amigos y todos los que conocieron a Edu”.