El canotaje de Concepción del Uruguay volvió a brillar en el plano internacional. Pedro Agustín Ratto regresó al país tras obtener la medalla de plata en la final del maratón K1 Sub23, disputada en Györ, Hungría, y fue sorprendido con un cálido recibimiento organizado por su club, Regatas Uruguay.
La celebración reunió a familiares, amigos, compañeros palistas y allegados que lo esperaron en las inmediaciones del Puerto Nuevo. Con espuma, pasacalles, camisetas diseñadas especialmente y mucha emoción, el joven subcampeón mundial fue homenajeado por la comunidad deportiva que lo vio crecer.
Una carrera de esfuerzo y logros
Ratto, conocido entre sus compañeros como “Palomo”, se convirtió en uno de los máximos exponentes del canotaje local. Después de haber finalizado séptimo en la edición anterior del mundial, este año logró dar un salto de calidad y subirse al podio.
“La tercera fue la vencida, se me escapó por poco el triunfo”, reconoció, al tiempo que confesó que “no me esperaba este recibimiento” y que se sentía feliz tras una temporada “muy larga y dura”.
Durante dos meses se preparó en Europa, experiencia que resultó clave para alcanzar la medalla de plata en una competencia de gran exigencia.
Emoción compartida con su gente
El festejo fue cuidadosamente planificado por su entorno, en especial por su entrenador, “Coco” Elola, quien se mostró visiblemente emocionado. “Es un orgullo enorme ver los frutos de tantos años de trabajo con Agustín”, dijo.
La familia también tuvo un papel protagónico en la celebración. Sus padres, Gabriel y Florencia, junto a sus hermanos Luchi y Nacho, lucieron camisetas diseñadas por Way con los colores de Argentina y el escudo de Regatas, que llevaban la leyenda “Pedro Agustín Ratto, subcampeón del mundo”.
Su novia, Débora, amigos palistas y dirigentes del club lo rodearon de afecto en un homenaje espontáneo y multitudinario, donde no faltaron fotos, abrazos y felicitaciones.
El valor de la familia en el deporte
Ratto destacó el rol fundamental de su entorno cercano en cada etapa de su carrera. “Cuando las cosas no salen, la familia es la que siempre está. Este logro también es de ellos”, señaló.
El homenaje no solo fue un reconocimiento a la medalla de plata obtenida en el Mundial, sino también al camino recorrido por un deportista que, con humildad y sacrificio, se consolidó como referente del canotaje uruguayense y del deporte argentino. Fuente: Deporte Digital