Este mes de junio, en el marco de las actividades por el Orgullo LGBTIQ+, la Marcha del Orgullo en Paraná celebró 10 años de historia, lucha y visibilidad. Con ollas populares, sesiones de baile y espacios de contención comunitaria, la convocatoria reunió a integrantes del colectivo disidente y a vecinos que se acercaron a acompañar la jornada.
Uno de los organizadores destacó: “Las actividades que estamos tratando de realizar y empezar a consolidar es una olla popular y también estamos trabajando con la comunidad. Vamos a estar practicando una kiki session. Seguramente la gente ha visto en las plazas a la gente que está rancheando y bailando. Es una buena oportunidad, les invito a que se sumen. Es un poco sumarse de esa cultura y empezar a ver cómo estamos trabajando para la comunidad porque la idea es tejer lazos y apañarnos, es tratar de llevar un poco mejor lo que es todo este contexto social tan áspero y tan duro para todos”.
Celebración, contención y resistencia en cada expresión
En el evento se desarrollaron las llamadas kiki sessions, un formato que conjuga baile, moda y competencia como forma de expresión cultural de la comunidad LGBTIQ+. “Las kikis son momentos de celebración donde se llevan a cabo ciertas competencias, se trabaja en ciertas categorías de moda, de baile, pero todo en el marco de la celebración de la diversidad. Nació en los años ’20, se fue desarrollando más en los ’80, fue atravesando varios países y llegó hasta Argentina hace poco menos de 10 años. En Paraná tiene sus dos o tres años, aproximadamente, y lo estamos llevando a cabo. La idea es llevar a cabo una contracultura y tratar de llevar esta celebración de la diversidad, de contención y de darnos ese abrazo”, explicó el mismo referente.
La jornada también estuvo atravesada por la solidaridad. Iara Quiroga detalló parte del trabajo colectivo: “Estamos haciendo un guiso con pollo y un guiso vegetariano. También tortas fritas que estamos preparando con las compañeras. Gracias a la colaboración de la gente, pudimos llegar a la olla, que se está complicando poder alimentarse”.
Marcha del Orgullo: una década de conquistas y alerta social
Además del encuentro festivo y comunitario, la marcha tuvo un fuerte contenido político frente al contexto actual. Iara agregó: “Muchas personas no tienen trabajo, las personas en situación de calle se están acrecentando aberrantemente. Por suerte, pudimos concretar esta olla y estamos juntando alimentos no perecederos para ver si podemos replicar esta juntada”.
Violeta González, otra de las participantes, subrayó el valor histórico de esta edición: “En primer lugar, estos 10 años marcan una historia de lucha de la disidencia de Paraná, pero también confluyendo con las de todo el país y del mundo”.
Y concluyó con un mensaje de alerta y movilización: “Todos nuestros derechos están siendo vulnerados. En Argentina hemos conquistado leyes avanzadas (matrimonio igualitario, Educación Sexual Integral, la Ley del Cupo Laboral Trans, la Ley de Identidad de Género). Todo eso con Milei está en peligro, por eso en estos 10 años siempre hemos levantado esa bandera”.