Este plan de saneamiento profundo y recuperación de la trama vial incluye bacheo con material asfáltico, pavimento de hormigón y obras complementarias que comprenden el trabajo en cañerías de agua potable y cloacas.

“Atiende la necesidad de reparar lo que es visible, que es la capa superior de pavimento, ya sea rígido o flexible”, sostuvo Eduardo Loréfice, secretario de Planificación e Infraestructura.

“Además, se hace un trabajo integral arreglando posibles averías en la red de agua o cloaca, y se trabaja en subbase y base para que quede en condiciones, que soporte las exigencias del tránsito”, completó.

La obra tiene un plazo de ocho meses y, al igual que la totalidad de las intervenciones de la ciudad, es financiada con fondos municipales.