El talento entrerriano volvió a brillar en el escenario mayor de la danza. El paranaense Ciro Mansilla se lució en el papel protagónico del ballet Onegin, que regresó al Teatro Colón bajo la dirección artística de Julio Bocca. La célebre obra del coreógrafo británico John Cranko, basada en la novela de Alexander Pushkin, volvió a presentarse con una nueva puesta que conjuga excelencia técnica y profundidad dramática.
El estreno se realizó el viernes 3 de octubre ante una sala colmada. Mansilla interpretó al complejo personaje de Onegin junto a la bailarina Ayelén Sánchez en el rol de Tatiana. Ambos ofrecieron una actuación intensa y cargada de emoción, especialmente en el reencuentro final que marca el clímax de la historia.
El regreso de Onegin confirma su lugar entre los títulos más celebrados del repertorio del Ballet Estable del Colón. Desde su estreno en Buenos Aires en 1994, la pieza ha sido sinónimo de desafío interpretativo y excelencia artística, combinando romanticismo, tragedia y virtuosismo escénico.
Una historia de amores desencontrados
La trama de Onegin narra los amores imposibles entre Tatiana, una joven soñadora del campo ruso, y Onegin, un hombre sofisticado y distante. Su rechazo inicial desencadena un doloroso destino que culmina en un duelo trágico y un reencuentro desgarrador.
Cranko supo convertir esta historia en un ballet de enorme carga emocional, donde los movimientos y gestos reemplazan a las palabras. Cada escena, desde los bailes campestres hasta el dramático desenlace, está impregnada de humanidad y belleza.
En esta temporada 2025, el elenco alternará con destacados artistas invitados, entre ellos Marianela Núñez, primera figura del Royal Ballet de Londres, quien se sumará a las funciones de cierre para interpretar a Tatiana.
Brillante desempeño del Ballet del Colón
El elenco del Ballet Estable, dirigido por Julio Bocca, tuvo un desempeño sobresaliente. Stephanie Kessel brilló como Olga, y Fernando Luqui ofreció una interpretación conmovedora de Lensky, el poeta que encuentra la muerte en un duelo con su amigo Onegin.
Los ensambles y coreografías grupales —especialmente las escenas de las fiestas campestres y los bailes de salón— fueron ejecutadas con precisión y energía, destacando el nivel técnico y la cohesión del cuerpo de baile.
El trabajo de reposición estuvo a cargo de los reconocidos Agneta y Victor Valcu, junto con la supervisión artística de Reid Anderson, figuras de referencia en el universo Cranko. La escenografía y el vestuario mantienen el espíritu clásico del Ballet de Stuttgart, con una puesta visualmente deslumbrante.
Ciro Mansilla, un talento entrerriano en la escena internacional
Nacido en Paraná, Ciro Mansilla forma parte del prestigioso Ballet de Stuttgart, compañía que guarda una estrecha relación con la historia de Onegin. Su regreso al país marca un nuevo hito en su carrera internacional y en el vínculo del público argentino con esta obra emblemática.
El bailarín entrerriano fue elogiado por su interpretación sobria, expresiva y cargada de matices. Su desempeño reafirma el lugar de los artistas argentinos en los escenarios más exigentes del mundo.
Onegin continuará en cartel hasta el 14 de octubre con diez funciones programadas, en lo que promete ser uno de los puntos más altos de la temporada artística del Teatro Colón. (Con información de Clarín)