El Mercado Concentrador de Frutas y Verduras "El Charrúa" de Paraná es el espacio del que se abastecen verdulerías, gastronómicos y comercios de la zona. Su director, Humberto Brandolín, detalló en el programa Moviendo el Avispero, que se emite por Elonce Radio & Streaming, explicó que las variaciones en los precios de los productos dependen de factores como el clima, la estacionalidad y la oferta y demanda.

“En el caso de las verduras de hoja, como acelga y espinaca, se producen todo el año, salvo la espinaca que solo tiene ciclo en invierno. En agosto y septiembre, la producción de hoja es la mejor, es la época ideal para consumirla. Pero en verano la situación cambia: el sol afecta mucho, el rinde baja y la producción de lechuga también se complica”, explicó.

Y completó: “En el caso del zapallito, choclo y berenjena son productos que en invierno escasean. Muchas veces, el cliente pide zapallito en pleno invierno y casi en todo el país no se produce, salvo en el norte donde el clima es más favorable. Entonces, una sola provincia queda a cargo de la producción, lo que no alcanza para abastecer a todo el país y hace que el precio se encarezca”.

También indicó que productos como la banana y el kiwi se encarecieron debido a los costos de importación y el valor del dólar. “Bolivia interrumpió temporalmente el envío de bananas, y Brasil aumentó el precio de las suyas. La oferta y la demanda influyen directamente: hace un mes la caja de bananas costaba 22, y hoy se cotiza entre 38 y 40 pesos, debido al tipo de cambio”, explicó Brandolín en el programa Moviendo el Avispero, que se emite por Elonce Radio & Streaming.

Consejos para aprovechar los precios de frutas y verduras

En cuanto a los precios, Brandolín señaló que hoy conviene aprovechar la compra de papa, cebolla, espinaca y frutilla, que registran valores más bajos por exceso de producción y temporada favorable. La caja de frutilla de entre cuatro a cinco kilos, por ejemplo, se ubica entre 10.000 y 12.000 pesos, mientras que la bolsa de papa ronda los 4.000 a 5.000 pesos.

"La frutilla es la más buscada y la temporada durará unas tres o cuatro semanas. Cuando aumente el calor, la producción comenzará a disminuir, ya que el sol puede quemar los cultivos y la lluvia impide la cosecha, lo que genera escasez y aumento de precios”, especificó el director de El Charrúa.

“La mayoría de las frutas están a buen precio. Por ejemplo, la naranja se encuentra barata. Pero en manzanas y peras, los precios varían según la calidad y el tamaño: un cajón de manzana puede costar entre 15.000 y 30.000 pesos. Incluso dentro de una misma marca existen diferencias; algunas manzanas de segunda calidad se venden más baratas, mientras que otras, más jugosas o de mejor tamaño, tienen un precio más elevado. Lo mismo ocurre con los tomates, cuyos valores dependen del tamaño y la calidad, oscilando entre 10.000 y 25.000 pesos por cajón”.

Créditos blandos y a largo plazo

Finalmente, Brandolín destacó la necesidad de créditos blandos y a largo plazo para productores y mercados, con el fin de sostener inversiones en infraestructura y mejorar las condiciones de producción y comercialización.

“Necesitamos financiamiento accesible, con créditos blandos y a largo plazo, tanto para los productores como para los propios mercados. Si se otorgaran créditos a cinco o seis años, los productores podrían invertir, pero actualmente llevamos más de seis años sin acceso a estos fondos. Desde la Federación Nacional de Mercados Mayoristas (Fenaomfra), estamos gestionando créditos internacionales y observando experiencias como la de Santiago del Estero, donde el gobierno financió un mercado que luego pagó en diez años. Sin embargo, hoy seguimos complicados y sin recursos suficientes”.

Sobre "El Charrúa"

El Mercado Concentrador de Frutas y Verduras "El Charrúa" de Paraná, ubicado sobre avenida Almafuerte al 3.634, trabaja las 24 horas y nuclea a 15 operadores mayoristas y 14 productores hortícolas locales; al predio, por día ingresan entre 350 y 400 vehículos, principalmente los lunes y jueves, mientras que los miércoles suelen ser las jornadas de menor actividad.

La dinámica comienza antes de las 6 de la mañana, cuando llegan los camiones con productos frescos que luego se distribuyen en la ciudad y localidades aledañas; pero el horario de atención comercial es de 6 a 13.