<b>En 12 horas el río Paraná en el puerto de la capital entrerriana bajó 6 centímetros</b>, registrando una altura actual de 0,34 metros. Según los registros que realiza Prefectura Naval, a la hora 0 de este viernes, se ubicaba en 0,40 y al mediodía dicha medición bajó.
Acompañados por Carlos, un baqueano del río, <b>Elonce TV</b> llegó hasta el extenso banco de arena que emergió entre las islas Curupí y Corazón que se ubican frente a la sede de Prefectura y con el drone se captaron impactantes e impresionantes imágenes del nuevo paisaje que presenta el Paraná.
En diálogo con el pescador, el hombre contó cómo están atravesando esta situación de bajante, a la cual se le suma la situación de pandemia por el Covid-19 y afirmó: "<b>Es muy raro ver el río así, de los 40 años que tengo nunca lo vi tan bajo</b>. La estamos peleando con el pescado y las ventas porque se vende poco y nos dedicamos a hacer otras cosas".
"Con el río en niveles tan bajos, está saliendo muy poco y nada, porque lo que baja se enfría el agua y el pescado no come. Hasta hace unos días estaba saliendo amarillos, moncholos y patí, pero lo que bajó de golpe de vuelta, se cortó todo", indicó.
Carlos contó que ante las restricciones por la cuarentena, "podemos pescar de lunes a viernes hasta las 17; los sábados y domingos no podemos andar porque Prefectura te advierte que el fin de semana no se puede pescar y nosotros lo respetamos. Al que sale, ante la tercera advertencia le secuestran la canoa. Y si el pescador no sale, ¿por qué va a salir otra persona un fin de semana?", se preguntó a modo de reflexión. En tal sentido, destacó y respetó la labor que realizan los prefectos.
Sobre el estado del río, el pescador de Puerto Sánchez señaló que "<b>nos encontramos con bancos de arena donde nunca salieron</b>, te queda pescar en el canal donde cruzan los barcos grandes. El banco está demás playito y hay mucho camarón". Y agregó que "<b>te encontrás con raigones, palos, piedras que nunca se vieron, está muy peligroso</b> y el que no conoce puede chocar cualquier cosa. Aun nosotros por ahí <b>a la noche cuando venimos con reflectores y linternas nos topamos con los bancos de arena, hay que tener mucha precaución para andar</b>".
Cuando Carlos sale a pescar, al mismo tiempo lo hace su hijo pero en otra canoa "y para otro lado". "Desde los 7 años anda en el río y ahora tiene 17", dijo el hombre que es empleado municipal "pero no te alcanza el sueldo para mantener una familia y no te queda otra que salir a pescar". Su familia está compuesta por su mujer y cuatro hijos.
"Soy nacido y criado en Puerto Sánchez, mi abuelo fue uno de los fundadores", dice con orgullo este baqueano del río. <i>Elonce.com</i>