Boca está un poco más cerca de cumplir el objetivo que se propuso en este cierre del campeonato, no terminar último. En la Bombonera, superó por 1-0 a Arsenal en un encuentro que terminó muy caliente y superó en la parte baja de las posiciones a Argentinos y Estudiantes. Erviti, a los 30 del segundo tiempo, anotó el gol tras una buena maniobra colectiva.
El equipo de Bianchi fue más que la visita y generó chances como para justificar la victoria, pero careció de efectividad y se encontró con un seguro Campestrini. Los de Alfaro se fueron muy calientes: sobre el final del primer tiempo le anularon un gol a Furch por una posición adelantada que claramente no existió. El delantero estaba habilitado por dos metros.
En tanto, Germán Delfino no le cobró un penal a Boca, a los 13 del complemento: Lugüercio llegó tarde a la pelota y lo tocó abajo al Burrito Martínez. Minutos después, Riquelme remató desde la medialuna y el balón le pegó en la mano a Braghieri, quien se tiró para tapar y no tuvo intención.
El Xeneize contó con dos mano a mano de Acosta, quien en el último minuto hasta se gambeteó al arquero y definió increíblemente afuera, y con una sutileza de Riquelme que terminó en el travesaño. Arsenal no llegó con peligro sobre el arco de Ustari. Ya con el partido terminado, Delfino lo expulsó a Marcone por hacerle un gesto.