La Justicia provincial anuló la cesantía del ex tesorero de la Municipalidad de General Campos, Nahuel Emiliano Guiffrey, y ordenó su reincorporación al plantel municipal, junto con el pago de los salarios caídos desde el año 2021 hasta su efectivo reingreso. La decisión estuvo vinculada al faltante de 36.000 dólares que habían desaparecido de la caja fuerte del municipio.
El fallo fue dictado por la Cámara en lo Contencioso Administrativo N.º 2, que hizo lugar a la demanda presentada por Guiffrey contra el municipio. Los jueces consideraron que el procedimiento administrativo que derivó en su expulsión fue ilegítimo y vulneró garantías básicas, como el derecho de defensa y el debido proceso.
Según se desprende de la sentencia, durante el sumario administrativo no se le imputó de manera concreta una conducta específica al entonces tesorero. Además, se indicó que no existió una adecuada fundamentación del decreto que dispuso la cesantía ni pruebas suficientes que demostraran culpa o negligencia en su accionar.
El tribunal también cuestionó que se le atribuyera una responsabilidad objetiva por el solo hecho de ocupar el cargo, sin acreditar que hubiera tenido participación directa o indirecta en la desaparición del dinero. En ese sentido, se remarcó que la normativa vigente exige probar negligencia o culpa para aplicar una sanción de esta magnitud.
La resolución judicial declaró la nulidad de los decretos municipales que dispusieron la suspensión, cesantía y el rechazo de los recursos presentados por Guiffrey.
Asimismo, ordenó al municipio el pago de los haberes adeudados, con intereses, y la imposición de las costas del proceso a la comuna, indica El Entre Ríos.
El faltante de los 36.000 dólares había sido detectado en enero de 2021, aunque el dinero se encontraba resguardado en la caja fuerte municipal desde mayo de 2020. A partir de ese hecho, se inició el sumario administrativo que terminó con la cesantía ahora anulada por la Justicia.
De este modo, la Cámara concluyó que la sanción aplicada fue desproporcionada y arbitraria, y que el procedimiento estuvo viciado desde su inicio, lo que motivó la decisión de dejar sin efecto la medida disciplinaria y restituir al ex funcionario a su cargo.