Cada mañana, entre las 8 y las 10, un grupo de voluntarios de Cáritas Paraná se instala en la plaza Alberdi para ofrecer un desayuno caliente a personas en situación de calle. La acción solidaria surgió como respuesta a una necesidad creciente entre quienes atraviesan el invierno sin techo, sin recursos y en muchas ocasiones, con graves problemas de salud y consumo.

“El desayuno es para quienes están en situación de calle, o quienes se acercan porque necesitan tomar algo caliente”, explicó Elina, una de las voluntarias que participa de la actividad. “Es una iniciativa que organiza Cáritas”, señaló.

Las mesas, termos y alimentos se arman con esfuerzo, pero con convicción. La escena se repite cada día hábil en el corazón del centro paranaense, donde la solidaridad se convierte en abrigo para muchos.

Ayuda que nació de una urgencia

Susana, otra de las presentes, relató que la propuesta surgió luego de un hecho que marcó a toda la comunidad: “Sabemos que hay comedores, pero teníamos la necesidad de seguir ayudando, sobre todo a gente que pasa frío. Después de todo lo que pasó, donde una persona falleció mientras estaba en la calle, sentimos que había que hacer algo más”.

En sus palabras se refleja el compromiso que los moviliza: no solo ofrecer un café o unas galletitas, sino estar presentes, escuchar y acompañar.

“Las personas en situación de calle nos cuentan lo que les pasa, su vida, y notamos que muchas están atravesadas por el consumo. Es difícil, pero se los trata de acompañar de alguna manera”, afirmó con emoción.

Cómo colaborar con la iniciativa

Desde el equipo solidario invitaron a la comunidad a sumarse con donaciones. “Quienes quieran colaborar pueden acercarlas a Rosario del Tala 641. Recibimos galletitas, café, té, leche y todo lo que se necesita para hacer un desayuno”, indicaron.

Además del alimento, quienes ayudan destacan que el valor del encuentro es inmenso. “Da mucha felicidad ayudar a la gente que más lo necesita”, sintetizó Elina.