El regreso de Coco Basile a Racing fue como el amor a primera vista: casi sin la necesidad de abrir los ojos. Son el uno para el otro. Sin embargo, la Academia es un fiasco en las primeras cuatro fechas. No sólo no logró un triunfo: es una auténtica decepción, que hasta incluyó momentos de zozobra entre el entrenador y algunos hinchas iracundos. Tendrá hoy un nuevo desquite. Ambos lo tendrán: Coco Basile, para levantar el autoestima y Racing, que está otra vez muy cerca de los puestos de la Promoción. Racing jugará hoy contra All Boys, un equipo que tiene una identidad y que lucha, con lo poco que tiene, por alejarse de esos mismos puestos comprometidos. Eso sí: lamentablemente jugará sin su cuota de habilidad, la que suele aportar (últimamente, en cuentagotas) Gio Moreno. Tiene un esguince en el tobillo izquierdo. A pesar de que el técnico había decidido incluirlo originalmente en la nómina de concentrados, el colombiano continuó con mucho dolor y el cuerpo médico recomendó no utilizarlo. Moreno se lesionó en la práctica vespertina de anteayer, cuando tuvo un choque con el juvenil Maximiliano Russo y se retiró con un intenso dolor.
Coco Basile no pierde la fe. Aunque en sus últimas declaraciones pareció pisar el freno. "All Boys es el peor rival que nos puede tocar. En el mediocampo es un equipo muy combativo, que te muerde los talones", explicó el entrenador en declaraciones formuladas al programa Pasión Nacional, que se emite por Radio Nacional (AM 870), que conduce un ex compañero suyo de la década del 60: el Mariscal Roberto Perfumo.
Coco está preocupado por un delantero adversario. "Matos es uno de los mejores cabeceadores del fútbol argentino. Lo sigo desde que estaba en Deportivo Armenio", advirtió.
Y hasta se refirió a la ausencia del pichón de crack. "Es una pena que no tengamos a Gio. Vamos a analizar algunas variantes todavía", advirtió Basile. ¿Valentín Viola, Luis Fariña o el paraguayo Federico Santander estarán en su lugar? Ése es el gran problema de Racing de hoy: no tener una identidad definida, no saber con precisión qué dibujo táctico les va a ofrecer a los hinchas.