Un millonario robo a una jubilada se registró en la localidad de Berisso, partido de La Plata, y dejó al descubierto la extrema vulnerabilidad de los adultos mayores frente a la inseguridad. La víctima, una mujer de 86 años, fue sorprendida en su dormitorio durante la noche por dos delincuentes que la maniataron, la ahorcaron y se llevaron todos sus ahorros.
El hecho ocurrió en una vivienda de calle 157, casi esquina 13, según confirmaron fuentes policiales. De acuerdo con el testimonio de la mujer, los ladrones vestían ropa oscura, con guantes negros y buzos con capucha. La sorprendieron mientras descansaba, y aunque no exhibieron armas, uno de ellos la sometió sobre la cama para exigirle dinero y objetos de valor.
Los investigadores apuntan a dos jóvenes de unos 20 años, a quienes la mujer dijo haber visto merodeando días antes por el barrio. Según la denuncia, incluso se habían reunido en la esquina de su casa con otros muchachos, lo que refuerza la hipótesis de un ataque planificado.
Golpe millonario
Bajo amenazas y violencia, los ladrones obligaron a la jubilada a revelar dónde guardaba su dinero. Primero, extrajeron cinco millones de pesos que estaban dentro de un placard. Luego, hallaron mil dólares en un monedero. El resto, 17 mil dólares, se encontraba escondido en una caja plástica dentro de la vivienda.
En total, el monto sustraído ascendió a más de 25 millones de pesos. Tras apoderarse del botín, los delincuentes ataron a la mujer con un cinturón y se dieron a la fuga por la puerta principal, llevándose también la llave de la casa.
Pese al violento ataque, la jubilada logró sobrevivir y denunciar el hecho a la Policía. Fue asistida por personal médico y contenida por familiares, aunque el shock emocional por la situación fue evidente.
El llamado sospechoso
Un detalle clave de la investigación es un llamado telefónico que la víctima recibió horas antes del robo. Una voz femenina se hizo pasar por su sobrina y le solicitó los números de serie de sus dólares con el pretexto de que debían ser registrados en la AFIP.
La mujer comenzó a dudar cuando la supuesta sobrina la derivó con un hombre cuya voz no reconocía. “Ahí sospeché de que algo raro pasaba y no seguí hablando”, confió a la Policía. Los investigadores creen que esa comunicación podría haber servido para confirmar que la víctima tenía grandes sumas en efectivo.
La causa quedó en manos de la fiscalía de turno, que investiga la posible relación entre el llamado previo, los jóvenes vistos en el barrio y los autores materiales del millonario robo a la jubilada. Por el momento, no hay detenidos. (Con información de Clarín)