Sociedad Cardiólogo

Médico entrerriano atendió a Perón: los últimos días del ex presidente

Carlos Garbelino, con tan solo 24 años, era el integrante más joven del equipo que cuidaba al entonces Presidente de la Nación. “Hicimos todo para resucitarlo, pero el daño era muy grave”, dijo a Elonce TV.

1 de Julio de 2021

Juan Domingo Perón falleció el 1 de julio de 1974, en la Quinta presidencial de Olivos, debido a un paro cardíaco resultado del agravamiento de la cardiopatía isquémica crónica que padecía. Los meses previos a la muerte, se conformó un equipo de siete médicos para cuidarlo. Carlos Garbelino, cardiólogo y oriundo de Victoria, con tan solo 24 años, formó parte de ese grupo.

 

El profesional, estudió medicina en la Universidad Católica de Córdoba. En un momento lo enviaron a capacitarse al Hospital Italiano. “A raíz de ciertas circunstancias, me quede en Buenos Aires a trabajar con Domingo Liotta. En 1973, el doctor era Secretario de Salud Pública de la Nación y en septiembre de ese año, a Perón le dio un cuadro de insuficiencia cardiaca que, si no era tratado, se convertía en un edema agudo. En ese momento, fue asistido por un suboficial enfermero retirado del ejército y un médico obstetra, vecino de la casa donde estaba el General”.

 

En ese momento se formó un equipo de seis médicos del Hospital Italiano y seis enfermeras para cuidarlo Domingo Perón. “Empecé una semana después y fui el séptimo médico que participó del grupo de profesionales”, dijo, y agregó que “cuando comenzaron los cuidados, el General estaba bien, tenía secuelas de un infarto con una cardiopatía isquémica a la cual no había que exigirle mucho, pero Perón quería cumplir con todo el mundo”, dijo.

 

Y agregó que “una de las circunstancias que desbarranca el estado de salud de Perón es cuando viaja a Paraguay a agradecer al pueblo luego de su exilio. Era invierno y él viajó en barco, pasó frio y ahí su salud se complicó”. A su vez, Garbelino comentó que “nosotros estábamos para lo que el necesite, hacíamos guardias de 24 horas. Nos movíamos a donde se moviera él. Era un paciente que cumplía con las indicaciones, pero a veces era difícil manejarlo”.

 

El ex presidente “estuvo lucido hasta el último momento”. Garbelino recordó que tenían una “relación paternal” de Perón con nosotros: “Nosotros lo tratamos de general y él nos decía `mijo´. El equipo lo admiraba”.

 

Día del fallecimiento

 

El medico contó que él estuvo de guardia el domingo 30 de junio. “Entregué mi turno y me fui al hospital. Estamos operando con el doctor Liotta y nos llega la noticia que Perón había hecho un paro cardíaco. Terminamos de operar y fuimos a la casa, le hicimos maniobras de resucitación”.

 

“El General se descompuso a las 10:30 y a las 13 se lo dio por fallecido. Cuando le hicimos un electroencefalograma, salió plano, es decir que no había actividad en el cerebro. Se le hizo todo, pero el daño cardiaco era muy grave”, explicó.

 

Al finalizar, recordó que “a uno a veces le duele los últimos días de Perón. Hablo de la soledad del poder. Los últimos diez días, se decidió que estemos de a dos médicos y éramos lo únicos que estábamos con él, sin familia sin nadie”. Elonce.com