Internacionales Para proteger el lugar

Japón prohíbe visitar la isla de Okinoshima, patrimonio mundial de la Unesco

Japón prohibirá a partir del próximo año las visitas a la isla de Okinoshima, uno de los lugares más sagrados del archipiélago, inscrito el domingo pasado en el patrimonio mundial de la Unesco, se anunció.

15 de Julio de 2017

Esta isla del mar de Japón ya estaba vedada a las mujeres, y

sólo recibía visitantes un día al año, el 27 de mayo. Su número se

limitaba a 200 hombres, que debían hacer sus abluciones ("purificación ritual

antes de algunos actos religiosos), en el mar, antes de entrar en Okinoshima.

 

Pero el complejo de templos Munakata Taisha, propietario de la

isla, decidió prohibir a partir de 2018 las visitas de todos los

laicos, mujeres y hombres, para proteger el lugar, declaró un

portavoz a la AFP.

 

Los monjes sintoístas serán los únicos que podrán acceder a la

isla, así como los investigadores que trabajan para preservar la

zona.

 

"Se necesita una preservación estricta ahora que la isla está

en la lista de la Unesco", declaró el portavoz. "Sería arriesgado

seguir recibiendo 200 visitantes a la isla, añadió el portavoz.

 

Según la tradición, el único residente de Okinoshima, situada

frente a Kyushu, la isla más meridional de Japón, es un monje. El

lugar fue durante mucho tiempo un lugar de intercambio con el

extranjero y alberga numerosos vestigios de ese pasado.

AFP-NA