Aporte a cámaras empresariales. A partir de este mes, los comercios de todo el país ya no estarán obligados a realizar aportes al Instituto Argentino de Capacitación Profesional y Tecnológica para el Comercio (INACAP), una entidad que hasta ahora recibía fondos de manera compulsiva mediante cláusulas incluidas en varios convenios colectivos. Con esta medida, el aporte pasa a ser voluntario. El instituto, creado en 2008, recaudaba alrededor de $70.000 millones al año.
La eliminación de la obligatoriedad se da en el marco de una serie de reformas impulsadas por el Gobierno nacional para reducir cargas económicas que no estén explícitamente justificadas por ley. En el sector empresario celebran la medida como un alivio financiero importante, ya que el aporte representaba un 0,50% del salario de un trabajador de la categoría Maestranza “A”, lo que en marzo significaba $4.725,02 por empleado.
Un “impuesto privado” sin control público ni rendición de cuentas
En caso de no abonar el aporte, los empleadores eran intimados y hasta se les iniciaban acciones legales, aunque no estuvieran afiliados a ninguna cámara empresaria. El INACAP, que funciona como una asociación civil sin fines de lucro, se nutría de estos ingresos a través de un acuerdo entre la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS) y entidades como la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Unión de Entidades Comerciales Argentinas (UDECA).
Estos fondos se distribuían entre cámaras del interior y no existía una rendición pública y detallada sobre su uso. El Decreto 149/2025, publicado en marzo, puso fin a esta práctica al declarar que “las Convenciones Colectivas de Trabajo no podrán imponer aportes, contribuciones o cualquier otro tipo de carga económica en beneficio de las cámaras, asociaciones o agrupaciones de empleadores a cargo de no asociados o afiliados a dichas entidades, salvo que dichas cargas resultaren aceptadas voluntariamente por estos últimos”.
La norma otorgó 90 días de adaptación a las cámaras empresariales, plazo que vence este mes. La medida ya está en plena vigencia y, según advierten desde el Ejecutivo, los institutos o entidades que sigan exigiendo pagos estarán en falta.
Elogios desde el Gobierno y reparos desde las cámaras tradicionales
El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, defendió la decisión con dureza: “En el modelo de la casta, tanto empresarios (no todos) como gremialistas, han logrado ir ‘colando’ otras contribuciones para fines totalmente ajenas al objeto de la negociación salarial. Así, fueron incorporando cargas obligatorias para financiar asociaciones empresarias, ´institutos de capacitación’ y demás objetos variopintos que empezaron a operar como verdaderos impuestos privados”.
La Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM) respaldó el decreto y señaló: “Este aporte sólo encarecía los costos laborales porque no representa ningún beneficio ni para el trabajador ni para el empleado, si decide no capacitarse”. Además, agregaron que “es un cambio significativo en las obligaciones que hasta ahora debían cumplir los empleadores”.
CADAM también advirtió sobre maniobras confusas desde el propio instituto: “En virtud del ‘Aviso Importante’ publicado por el Instituto Argentino de Capacitación Profesional y Tecnológica para el Comercio (INACAP) en la que se insta a seguir pagando de manera obligatoria el aporte, desde CADAM advertimos que la comunicación no es certera y genera confusión, ya que a partir de junio no se deberá abonar más de manera forzosa según el Decreto 149/2025, que establece que será voluntario. Sin embargo, la comunicación busca evadir el tema y genera confusión, cuando el decreto es determinante”.
El INACAP defiende su rol y busca sostenerse con aportes voluntarios
Desde la CAC, en cambio, lamentaron el cambio normativo y defendieron el funcionamiento del instituto: “Puede afirmarse que los recursos del INACAP no solo permiten una amplia y profesional actividad capacitadora, sino que también resultan fundamentales para cientos de cámaras empresarias de toda la Argentina, que de otro modo probablemente no podrían subsistir”.
El INACAP fue creado oficialmente en 2008 como una asociación civil independiente, aunque sus fondos fueron definidos en el marco de negociaciones paritarias homologadas por el Ministerio de Trabajo. Previamente, su antecedente fue el INCAPTEC, fundado en 1975.
Actualmente, el instituto ofrece cursos gratuitos y pagos en temáticas como administración, economía y finanzas, logística, marketing y ventas, entre otros. Sin embargo, ahora dependerá de la decisión voluntaria de los empleadores continuar aportando para sostener su actividad. (Con información de Infobae)