Defensores del Pueblo de Paraná y Santa Fe se reunieron este martes con los responsables de las empresas Etacer y Fluviales que prestan el servicio de transporte de pasajeros entre ambas localidades. El objetivo del encuentro fue tratar la calidad de la prestación del servicio debido a las largas filas que se repiten día a día en las Terminales para viajar de una ciudad a la otra.
“La situación es compleja, permanentemente recibimos reclamos de estudiantes y trabajadores que hablan de frecuencias prolongadas en el tiempo y precariedad en Ciudad Universitaria”, expuso a Elonce el Defensor del Pueblo de Santa Fe, Jorge Henn. Y explicó: “Los empresarios reconocen la situación, entienden que hay medidas que se pueden tomar en relación a la alta concentración del transporte en determinadas horas y la necesaria articulación con la Universidad Nacional del Litoral y la Universidad Nacional de Entre Ríos”.
“Lo cierto es que hay una gran cantidad de personas que la pasan mal, que esperan hora y media y más, que están sometidos a grados de inseguridad y más allá de la actitud propositiva de los empresarios, el transporte es un servicio público y tiene que prevalecer el interés del usuario”, indicó Jorge. En ese sentido, fundamentó: “Cada uno defiende su interés, las empresas tienen estudios de costos, problemas de subsidios, de flotas y de inseguridad, pero las Defensorías del Pueblo nacimos porque frente al Estado o a las empresas que prestan servicios públicos, alguien tenía que defender el interés del usuario y ese es el objetivo de esta reunión”.
Por su parte, la Defensora del Pueblo de Paraná, Marcia López, comunicó que en la reunión con los empresarios del transporte “se habló de trabajar con ambas universidades para verificar los horarios de ingreso y salida, a fin de arreglarlos y que no sean todos los mismos, sino que se puedan intercalar en los horarios pico para que no se produzcan esos cuellos de botella en las Terminales de Paraná y Santa Fe”.
Y agregó: “Fluviales manifestó que es un favor que hacen al cumplir con los rondines en ciudad universitaria de Santa Fe porque no tienen la obligación de ingresar, lo que genera más espera en las Terminales porque las unidades no alcanzan”.
De hecho, comunicó que presentaron el reclamo ante la Comisión Nacional Reguladora del Transporte, desde donde contestaron que las frecuencias efectivamente se cumplen, es decir, la cantidad de kilómetros que las empresas deben cumplir para este servicio. Desde la CNRT también recibieron los reclamos de parte de los usuarios y se comprometieron a verificar con la secretaría nacional de Transporte. Otro de los puntos a conversar es el vinculado a cuestiones de seguridad por la cantidad que usuarios que esperan en las garitas.
Durante la reunión, los responsables de Etacer y Fluviales también plantearon que “en todos lados, hasta 15 pasajeros pueden ir parados en los colectivos, pero entre Paraná y Santa Fe esto no ocurre y esa disposición afecta a la cantidad de usuarios que pueden ser transportados”. De hecho, mencionaron que el servicio podría entender como urbano –en lugar de interurbano- para sortear esta cuestión.
Pedirán a universidades modificar sus horarios
El próximo paso de los Defensores será reunirse con los rectores de las universidades UNL y UNER “para revisar los horarios” de ingreso y egreso de los estudiantes. “Porque es deber de las Defensorías exigir y buscar las condiciones para acordar”, argumentó Henn y analizó: “Debería haber una coordinación de parte de las dos universidades, sobre todo, porque las facultades de UNL reciben con mucho orgullo a los paranaenses”.
“Las empresas plantearon que están en condiciones de prestar el servicio, pero que el problema es por la concentración en determinados horarios y plantean que sería necesaria una coordinación; y sostienen que lo mismos problemas ocurren cuando se desarrollan determinados eventos o partidos de fútbol, como cuando Patronato jugó en la cancha de Colón”, expuso el Defensor del Pueblo de Santa Fe. De hecho, mencionó que la respuesta de los empresarios del transporte fue la siguiente: “Aunque pongamos todos los coches a disposición, es imposible de resolver”.
“Tampoco pueden modificarse las frecuencias para garantizar la mayor cantidad de unidades en los horarios pico por el convenio colectivo de trabajo con los choferes”, agregó López y mencionó que los colectiveros deben cumplir ocho horas de trabajo ininterrumpidas. “Además, si el coche vuelve vacío, es una frazada cortísima que se tapa y destapa”, coincidió su par santafesino. (Elonce)