El entrenador de Boca Juniors, Miguel Ángel Russo, debió ser internado nuevamente este lunes en el sanatorio Fleni, luego de que los médicos detectaran un cuadro de deshidratación y debilidad durante los chequeos médicos que se estaba realizando.
El director técnico, de 68 años y oriundo de Lanús, había asistido a la clínica aprovechando la jornada libre del plantel tras el empate 2 a 2 frente a Central Córdoba. Según se informó, los especialistas le indicaron una serie de estudios adicionales para determinar si seguirá internado o podrá ser dado de alta en el transcurso del día.
“Los médicos del sanatorio Fleni encontraron al experimentado director técnico deshidratado y débil, a 20 días de que le sucediese el mismo episodio por el que también fue hospitalizado”, señalaron fuentes médicas.
Antecedente reciente de internación
El pasado martes 2 de septiembre, luego de la victoria por 2 a 0 de Boca sobre Aldosivi en Mar del Plata, Russo también se había presentado en el Fleni para realizarse controles médicos de rutina.
En esa oportunidad, tras superar tomografías, resonancias y análisis de sangre, se le detectó en un estudio de orina una infección urinaria. Como medida preventiva, los médicos decidieron mantenerlo en observación y administrarle antibióticos e hidratación por suero.
La primera indicación fue que permaneciera durante gran parte del día en el centro médico, pero finalmente se resolvió su internación por precaución.
Evolución y recuperación
Durante esa internación, a Russo se le aplicó un tratamiento de hidratación con suero y antibióticos para acelerar su recuperación.
Luego de permanecer tres días bajo cuidado médico, el entrenador fue dado de alta el viernes 5 de septiembre, tras una evolución favorable.
Ahora, con este nuevo episodio de deshidratación, los médicos evaluarán su evolución para definir si el entrenador puede regresar a su domicilio o si permanecerá hospitalizado unos días más. (Con información de Noticias Argentinas)