Podría decirse que Juan Di Natale es el periodista de rock que lleva veinte años en la televisión y no es Bebe Contepomi. También que es el último hombre de negro que queda en CQC de aquella primera camada de periodistas y conductores que se impuso con un formato novedoso para la televisión argentina en la segunda mitad de los años 90, apoyados por la escudería Cuatro Cabezas. Podría decirse que es el joven canoso que ingresó en la TV haciendo cámaras ocultas en La TV ataca y también el que Adrián Dárgelos señala hoy como gran influencia de la lírica de Babasónicos. Un hombre elástico, que estudió Letras en la Universidad de Buenos Aires, pero desarrolló su carrera profesional en la televisión -va por la decimosexta temporada de CQC - y en la radio -veinte años ininterrumpidos en la Rock & Pop-. "Igual, la carrera de Letras no te forma para ser escritor. En general creo que tiene más bien una función inhibitoria: te bloquea en cuanto a esto, a una supuesta capacidad para convertirte en escritor o algo parecido; produce todo lo contrario", dice.
Luego de cuarenta minutos de distendida charla y un cuarto de hora ofreciendo su blanca timidez en la sesión fotográfica, Di Natale le pregunta a la jefa de prensa de Cuatro Cabezas, que no se movió de su lado durante toda la entrevista: "¿Dije muchas pavadas?"
Como adelanto y para el escudriño del lector, un puñado de frases fuera de contexto: " Imagen de radio es una especie de prehistoria de toda esta locura del cruce de medios". "Yo bailé con las Jaumach, hice cosas que están ahí... Tal vez es un archivo no del todo accesible que se ve medio mal, pero lo hice. Me entregué a la payasada". "Veo la televisión como un lugar de trabajo y creo que puedo ofrecer lo mío en distintos tipo de programas: me gusta hacer entrevistas, los juegos. La apuesta de la Rock & Pop de llevar a Mariano Closs es muy grande, porque en la radio, para un tipo de público, es una figura tan fuerte como lo es Mario".
La gran apuesta
Di Natale acaba de terminar su programa diario en la FM Rock & Pop - Day Tripper, de lunes a viernes, de 13 a 17-, con un miniconcierto de Siempreterno, la banda rockera que conduce la pareja Mimi Midnerely Acevedo y Sergio Rotman, junto a los ex Cadillacs Fernando Ricciardi y Ariel Minimal y el bajista Alvaro Ruso Sánchez -esta noche actúan en Groove-. "La radio apostó fuerte a la presentación de las bandas en vivo y yo siempre traté de tener grupos tocando, aunque sea dentro del estudio, ¿no? Un día metimos a los Decadentes, con Kapanga y Fernando de Catupecu Machu como invitados. Conté 24 músicos al mismo tiempo en el estudio y una especie de situación de fiesta de quince o casamiento afuera de la pecera".
-¿Cómo vivís las transformaciones que está viviendo la radio con el cruce de medios audiovisuales como Internet?
-En estos días, con la muerte de Juan Alberto [Badía], me acordaba al aire de Imagen de radio , que vendría a ser una especie de prehistoria de toda esta locura, del cruce de los medios y esas cosas. Me parece que lo que está bueno, en todo caso, es que haya más oportunidades de trabajo para la gente que se ha formado en este medio y tiene amor por la radio y por la cultura del rock, que es lo que a mí me gusta. Si la apertura de nuevos medios sirve para eso, bienvenido, pero lamentablemente que haya más medios no siempre significa más puestos de trabajo para gente preparada.
-Cuando empezaste a trabajar en la televisión, ¿tenías más o menos prejuicios que ahora, luego de dos décadas frente a las cámaras?
-Supongo que tenía cierta ingenuidad, que creo no me ha dejado del todo. Era un nene y estaba entrando en un mundo que tenía un montón de cosas desconocidas para mí, imprevistas y ni siquiera tan deseadas, o al menos no conscientemente deseadas. Creo que me costó un poco divertirme. Cuando empecé tenía algunos prejuicios, que a lo mejor los conservo hoy o los cambié por otros, pero me parece que actuaba de una manera más insensata, más temeraria, que la que actúo hoy. Las cosas que hice en ese momento no eran de alguien muy prejuicioso. Yo hice cámaras ocultas, bailé con las Jaumach, hice cosas que están ahí... Tal vez es un archivo no del todo accesible que se ve medio mal, pero lo hice. Me parece también que me entregué a la payasada.
-¿Y cuál creés que es la clave que mantiene a CQC tanto tiempo al aire?
-A esta altura es como una especie de marca fuerte, construida con mérito a través de los años. Hay pocas marcas que tengan ese peso. A cualquier persona que mira televisión en la Argentina le decís CQC y sabe de lo que estás hablando, no le tenés que contar. Creo que la versión actual del programa le sigue haciendo honor a esa marca y sigue buscando la forma de renovarla y ponerla al día. Seguramente este programa en algunas cosas se parece al original, al de las primeras dos o tres temporadas, que también se transmitía por América.
-¿Te podés imaginar conduciendo CQC diez años más?
-No sé.
-¿Pero te imaginás haciendo televisión en otro proyecto que no sea CQC ?
-Sí, por supuesto, como también me imagino fuera de la tele. Participé de algún que otro proyecto además de CQC . Veo la televisión como un lugar de trabajo para mí, eventualmente de exposición de ideas, de comentario. Creo que puedo ofrecer lo mío en distintos tipo de programas: me gusta hacer entrevistas, juegos. La verdad es que no tengo un proyecto en mente ni la fantasía de un programa especial que quisiera hacer. Estoy bien así.
Otra época
El chiste de que con la salida de Rock & Pop, Mario Pergolini lo abandonó dos veces, no le parece tan gracioso a Di Natale. O al menos no lo demuestra. "No siento que me haya abandonado a mí -se excusa seriamente-. Por otro lado, no es la primera gran figura que se va de Rock & Pop, que siguió adelante luego de la salida de Lalo [Mir] o de "la Negra", que se fue y volvió. Lanata estuvo una época y también se fue. Mario es una figura muy importante, no sólo de Rock & Pop, sino de la radio, y que su salida implica de alguna manera el final de una época para Rock & Pop, pero también el comienzo de otra. Se tomaron decisiones que hablan de orientar el perfil hacia una radio de rock, pero que al mismo tiempo transmita eventos deportivos y que tenga su tira deportiva diaria. La apuesta de llevar a Mariano Closs es grande, porque es una figura en la radio, tal vez en un sentido y para un tipo de público, tan fuerte como lo es Mario. Después de ese riesgo, me parece que la radio, más allá de la salida de Mario, es la misma y seguimos teniendo el staff más calificado en cuanto a periodismo de rock de la FM.
-¿Vos te definirías como "periodista de rock"?
-Bueno, creo que de alguna manera, sí. He entrevistado y recibido en mi programa a todos los músicos argentinos y a un montón de artistas internacionales, presento música todo el tiempo, me interesa la música y trato de estar informado. Así que de alguna manera sí, soy un periodista de rock o, si querés, un presentador de rock. Además de entretener, siento que parte de mi trabajo es ese y me gusta hacerlo. Fuente: (La Nación).