El modelo que Kim Kardashian utilizó durante la cena de Mert & Marcus House of Love sencillamente terminó por romperse. Resulta que las curvas de la modelo fueron demasiado para el diseño, incapaz de contenerlas.
La prenda de látex se estiró hasta su punto máximo mientras Kardashian se acercaba al restaurante y no aguantó hasta que la modelo entrara al lugar. En el momento de la ruptura, su marido apoyaba su mano en la cola de la voluptuosa mujer.
Lo cierto es que no se trata de la primera ocasión en que la modelo sufre este tipo de inconvenientes. Y, a juzgar por sus gustos, no será, tampoco, la última.