"Llegó hace unos meses y se mantuvo en secreto hasta que pudiese darse a conocer, lo cual se decidió que fuese ahora", detalló a Los Andes.
Agregó que la comunidad de la parroquia se enteró hace unos quince días y que se esperaba la autorización del obispo Franzini para proceder a exhibirla.
La reliquia se expondrá para su veneración al final de cada misa de este fin de semana en dicha comunidad. "Se están haciendo modificaciones en el altar para que quede en la parroquia de manera permanente", lo cual sería a partir de diciembre, según comentó Correas.
"Cuando nuestro querido obispo, monseñor Carlos María Franzini, viajó en mayo a Roma, gente de la comunidad y el párroco le pedimos que nos hiciera la gestión para que, desde la Santa Sede, nos enviaran la reliquia de algún santo. Le contamos a nuestro pastor que la parroquia había iniciado su vida cuando aquel Santo Papa nos visitaba (1987). Por supuesto, sabiendo que es muy difícil conseguir que sea una reliquia justamente de él", relató el cura párroco Sergio Martín.
"Con un gesto de inmenso amor, Franzini elevó al cardenal encargado del tema una carta pidiendo la reliquia y explicando este motivo. Así fue que, a menos de dos meses, llegaba de Roma una reliquia de la cabellera de San Juan Pablo II", continuó el sacerdote con el orgullo de poder mostrar desde hoy la reliquia.
