Los videos que filtraron de la declaración de la imputada de asesinato agravado por el vínculo y el uso de armas de Fernando Pastorizzo, muestran la estrategia de la defensa: mostrar a Galarza como víctima de violencia de género.
Con voz suave y entre sollozos, Nahir Galarza relató situaciones de gritos, empujones, rotura de cosas y hasta relaciones sexuales violentas. La joven de 19 años detalló que al fallecido "le tenía que mentir" o "directamente no le contaba lo que hacía para poder estar tranquila y hacer lo que quería"."Él sabía que yo me veía con otro, pero le molestaba verme con él, no le gustaba", dijo la joven en una de las audiencias por el juicio, que se desarrolla en Gualeguaychú. "Me veía en la calle, me ignoraba y no me saludaba", agregó Nahir.
Entre lágrimas, Galarza expresó: "Yo siempre le negué que me veía con otros porque él se ponía muy agresivo. Una vez tiró su celular al piso, me empujaba, se la agarraba conmigo, me gritaba mucho".
Como en anteriores oportunidades, la joven aseguró que hubo episodios de violencia de género y que "terminaba lastimada en las partes íntimas"."A pesar de que no lo demostraba, me acostaba y me largaba a llorar. Una vez se lo conté para que se diera cuenta que me hacía mal y no porque era víctima", señaló Nahir. Tras cuatro semanas de juicio, este martes se sabrá si la joven será condenada a prisión perpetua, tal como solicitó el fiscal de la causa. En caso de darse esta sentencia, Galarza podría convertirse en la mujer más joven en ser condenada a prisión perpetua en el país.