Los uniformados lograron dar con el muchacho y ? cuando le explicaron la situación ? el infractor exhibió documentación que mencionaba que la titularidad del rodado pertenecía a una mujer de nombre "Natalia".
Sin embargo, los agentes chequearon los datos y ahí saltó la burda maniobra, ya que el número de cuadro no coincidía con el de los papeles exhibidos. Además, se pudo verificar que existía pedido de secuestro de la moto, con fecha 06 de enero de 2012, por una denuncia de robo.
Finalmente, el vehículo quedó depositado en sede policial, a disposición de la autoridad judicial requirente. El joven, por su parte, fue correctamente identificado y puesto en libertad por disposición del fiscal en turno.
Diario Río Uruguay