El protagonista de “High School Musical” reconoció que atravesó un duro momento y no cede en la lucha contra el alcohol y las drogas. Ahora se siente mejor.
“Es una lucha interminable”, comentó sobre sus problemas de adicción. “Estaba bebiendo mucho; demasiado”, confesó.
Según contó, el actor comenzó a tomar cuando intentaba dejar de ser reconocido por su exitoso paso por “High School Musical” y “Hairspray”, e interpretar roles más maduros en películas como “El repartidor de diarios”.
La solución, dijo, consistió en afrontar el problema y acudir a terapia en Alcohólicos Anónimos. “Me siento mucho más cómodo siendo yo mismo. Ahora las cosas son mucho más fáciles”, reconoció.
“Es imposible llevar una vida honesta y satisfactoria como hombre y no cometer errores, y admitirlos cuando necesites hacerlo”, apuntó. “Soy un ser humano y he cometido muchos errores. He aprendido de cada uno de ellos”, concluyó.