"Una familia tipo no come con eso, y además tenemos que esperar a que la gente venga a comprar, porque ahora no hay tantas restricciones para que se acerquen hasta la costa", explicó el trabajador en relación a la actividad que desempeña. "Los pescadores artesanales vivimos de la compra directa; son muy pocos los que entregan a los acopiadores de la ciudad", agregó.
Al apuntar a "la no asistencia del gobierno hacia nosotros", Yeye contó que "nuestra situación es la misma y lamentamos que Prefectura nos está acorralando por el tema porque no quieren que pesquemos los martes y jueves, siendo que habíamos llegado a un convenio con Recursos Naturales por el que habíamos cedido sábados y domingos como para ayudar al tema pesquero que está bastante baqueteado". "Pero si nos sacan dos días más, de qué vamos a vivir los pescadores", se preguntó. En la oportunidad, el hombre de río advirtió que "las licencias para pescadores están paradas". "Desde Fiscalización nos dicen que hasta que no pase la pandemia no las otorgarán, y hay muchos muchachos trabajando en el río, ilegalmente, porque cuando Prefectura les pide el carnet, no los tienen", reconoció.
"Los artesanales solo pedimos que nos dejen trabajar en el río", remarcó. Punto aparte mencionó que "los artesanales trabajamos con una maya de 16 centímetros, más allá que el gobierno haya dispuesto que sea de 14".
"Es una locura, porque la maya de 14 centímetros hace depredación y en cambio, la de 16, elige al pescado. Por eso pescamos tranquilos en el Paraná", aseguró.
"La gente que se arrima al puesto no va a llevar un sabalito de medio kilo porque quiere un sábalo de más de dos kilos y ese es el pescado que sacamos los artesanales", sentenció Yeye. (Elonce)