El pasado jueves se filtró a los medios que durante una reunión en el Despacho Oval sobre la protección a inmigrantes provenientes de El Salvador, Haití y de países africanos, el presidente norteamericano preguntó por qué su país "está recibiendo a toda esta gente de países de mierda".
El propio Trump afirmó horas después que, si bien el lenguaje que empleó fue "duro", los medios no reprodujeron correctamente sus palabras. "Nunca he dicho nada despectivo sobre los haitianos aparte de que Haití, obviamente, es un país muy pobre y problemático", agregó el presidente.
Por su parte, el senador de Partido Demócrata, Richard Joseph Durbin, que estuvo presente en dicho encuentro con Trump, sostuvo que el mandatario sí había empleado un lenguaje "vulgar" y "racista".
El Gobierno de El Salvador envió una nota de protesta a EE.UU. en respuesta a tan "lamentables" declaraciones del mandatario. De la misma manera, Cuba ha condenado "enérgicamente" esas palabras, calificándolas de "racistas, denigrantes y groseras", además de "llenas de odio y de desprecio".