Gonzalo Pérez, presidente de la agrupación, en diálogo con el diario local Crónica, manifestó que uno de sus hermanos mayores tuvo la idea, y que cuando la trasladó al grupo no dudaron en ponerse a trabajar. "La verdad es que Comodoro Rivadavia estuvo muy conmovida con la situación y todo el mundo pudo ver la cantidad de medios nacionales que se acercaron a seguir de cerca todos los trabajos, más la gente que colocó sus banderas en la costanera o que simplemente se acercaron a despedir los barcos", sostuvo Pérez. Luego, el hombre enfatizó que la réplica es una forma de seguir estando con aquellas personas que hasta la actualidad no aparecen y, además, mostrarle a la comunidad que no todo está perdido.
Trabajaron 12 personas y fue confeccionado con acero en una escala un poco más chica que la normal. Sus medidas son 16 metros de largo por 5,80 de alto y casi 4 de ancho. "La esperanza y la fe es que todavía estén vivos, pero bueno este es el humilde homenaje que podíamos hacerle al ARA San Juan", agregó. En solo 15 días los integrantes de la Agrupación Isabel de la ciudad petrolera lograron realizar una réplica del submarino Ara San Juan, con el fin de homenajear a los tripulantes que se encuentran desaparecidos desde noviembre del 2017.
La construcción se llevó a cabo entre amigos, hermanos y gente de la ONG comodorense. Ayer, luego de mucho esfuerzo, terminaron de pintar el submarino y ya está completamente terminado. Según comentó a El Patagónico el presidente de la agrupación, Gonzalo Pérez, todavía no saben dónde colocaran la réplica y esperan gestionar el lugar en las próximas horas.
"La idea nació porque teníamos ganas de hacer un muro, como el que se realizó en Caleta Olivia, pero después un amigo, que tiene una empresa de caños, pensó esta idea y nos donó un caño de 16 metros de largo por 5 metros de alto y 3 metros de ancho", había contado Pérez a este medio.