El profesional explicó a este medio que "ya son detectadas en Maternidad. Hay un equipo que trabaja para darles contención a las madres desde que ingresan. Mediante estudios muy rápidos podemos saber si consume o no. Incluso cuando internamos niños y no nos concuerdan las historias que nos cuentan los padres, pedimos drogas en orina y a las horas tenemos el resultado". Sobre cómo actúan, informó que se "se pasa al servicio social y luego a salud mental. En Neo también tenemos una psicóloga que trabaja en el centro Huella que se encarga de la atención de estas mamás adictas".
"Hay un protocolo, sobre quienes vamos a ser los intervinientes y cómo acompañaremos a la mamá y luego a ella y al bebé. Incluye cómo continuaremos en la casa tras la internación. Son niños de altísimo riesgo. Hay muchos efectores que estamos puestos en juego en esto", precisó Casco.
Admitió que "cuando tenés una mamá que ha consumido puede tener una muy buena contención en el hospital, pero tenemos que ver qué pasa en el hogar, la forma en que continuará, si sigue consumiendo o no. Hay algunas que nos dicen que seguirán consumiendo. Cada caso es muy particular". Finalmente, el médico dio cuenta de que "depende de lo que consuma la mamá va a ser la manifestación del bebé y la prohibición de una lactancia o no. Hay chicos que pueden nacer con algún síndrome relacionado con la exposición a drogas maternas, pero generalmente es sintomatología pasajera. El bebé puede presentar como un síndrome de abstinencia". Elonce.com