“El dengue no respeta ninguna edad, ningún barrio, ni ningún nivel socio-económico, es decir que nos tenemos que cuidar todos porque es un bicho muy democrático”, destacó la secretaria municipal. “En general, la mayoría de los pacientes registra síntomas leves y no hay muchos casos que requieran internación, pero hay que estar muy alertas para cuando baja la fiebre a fin de determinar que el caso no se complique y termine siendo mortal”, recomendó Enrique al acotar que “una de las razones de las complicaciones es que no haya un buen seguimiento” del estado del salud del paciente y reiteró la importancia de acudir a la consulta médica después de los cinco o siete días de finalizados los síntomas. “Los síntomas de alarma son dolores abdominales, sangrado de las mucosas y síntomas neurológicos, como cuando la persona está somnolienta”, mencionó al respecto. En la oportunidad, Enrique comunicó que, “a través de las autoridades del Centro Comercial de Paraná solicitó a comerciantes que, de las vidrieras, “o retiren las plantas en agua o que cambien el agua todos los días y cepillen las paredes de los recipientes porque pueden llegar a ser reservorios de larvas de mosquitos y se pone en riesgo al empleado”. “La lavandina no mata a la larva”, remarcó.
“Hoy, es muy peligroso tener una planta en agua porque es donde se albergan huevos del mosquito que transmite el dengue; los vecinos piden que se fumigue, pero la fumigación no mata la larva”, reiteró al destacar: “Si no limpio mi casa para limpiar los reservorios de agua, perjudico a todos los vecinos”. “El mosquito Aedes aegypti es intra-domiciliario, no vuela a más de un metro de altura y siempre estará cerca de la gente porque necesita alimentarse de sangre”, cerró la secretaria municipal. (Elonce)