Según las autoridades, detectaron una "infinidad" de irregularidades, incluso la falta de habilitación para poder funcionar. La medida fue ordenada por el juez de Faltas Municipal Reynaldo Barbagelata. El lugar oficiaba como alojamiento y también como bar.
En mismo inmueble ya había sido noticias en anteriores oportunidades: Hace unos tres años fue clausurado un geriátrico y en julio de 2018 dos hombres fueron demorados por montar una oficina realizaban gestiones y confeccionaban documentación apócrifa.