"Lamentablemente, como estamos a vísperas de la fecha de los sucesos que aún están en proceso de apelación, deben inventar para vender", se quejó el abogado en comunicación con el medio porteño. En una semana se cumple el primer aniversario del crimen de Fernando Pastorizzo por el que Nahir fue condenada en primera instancia a prisión perpetua el 3 de julio pasado.
Ese día, los jueces Mauricio Deruddi, Arturo Dumón y Alicia Vivian sentenciaron a la joven, de 20 años, por homicidio calificado por la relación de pareja que tenía con la víctima. El tribunal desestimó los agravantes de alevosía y de uso de arma de fuego planteados por la fiscalía y la querella. También, que la imputada hubiera sido víctima de violencia de género, como pretendía su defensa. De quedar firme la condena, la joven deberá pasar 35 años en la cárcel. El crimen ocurrió pasadas las 5.30 de la mañana cuando Galarza y Pastorizzo se trasladaban en la moto del joven. Según se reconstruyó durante el juicio, cuando llegaron a una calle de tierra, Galarza le efectuó dos disparos a quemarropa con el arma reglamentaria de su padre.
Pastorizzo quedó tendido agonizando y ella se fue caminando a su casa. Dejó el arma en su lugar, le envió un mensaje de texto al joven moribundo y se acostó a dormir. Durante las primeras horas negó estar presente al momento del crimen y, por la noche, confesó el episodio, aunque luego se desdijo.