Fuentes oficiales indicaron que el hecho trascendió a partir de una comunicación recibida a la central de emergencias 911, en la que se advertía que en la guardia del Sanatorio Plaza había ingresado una ambulancia que transportaba a un hombre mayor con laceraciones y múltiples lesiones en todo el cuerpo, hematomas y hemorragia interna.
De acuerdo a lo manifestado por los médicos, la víctima estaba consciente y las lesiones serían de una golpiza recibida 48 horas antes. El hombre, identificado como Paulino O. quedó internado en terapia intensiva del sanatorio en estado reservado. La policía estableció poco después que la responsable de las heridas sufridas por Paulino sería su propia esposa, Teresa A., de 77 años.
Al ser notificada de tal novedad, la fiscal Georgina Pairola ordenó la detención de la mujer y que se le tome declaración a un vecino de la pareja quién habría acudido en ayuda del hombre. Teresa A. quedó detenida e incomunicada en la seccional 2ª. La fiscal ordenó una seria de medidas para determinar cómo ocurrieron los hechos.