Según la información oficial, alrededor de las 19.30 se recibió un llamado a la central de emergencias 911 que daba cuenta de que habían dejado un bebé recién nacido con la documentación y un bolso con ropa, en la iglesia ubicada en Riccheri 280. De inmediato arribaron al lugar un móvil del Comando Radioeléctrico y una ambulancia del Servicio Integrado de Emergencias Médicas (Sies).
El personal médico del Sies, que asistió a la criatura, constató que se encontraba en buen estado de salud y, según la documentación que dejaron junto al pequeño, tendría 3 días de vida y se llamaría Lionel. Una vez que se comprobó que, más allá de que tenía una venda en una de las manitas, estaba bien quedó alojado en el Hospital del Centenario, a cargo de la Secretaría de los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Familia de Santa Fe.
El padre Víctor Pratti, párroco de la iglesia, contó que "anoche ni bien empezó la celebración vi un movimiento grande en la entrada de la parroquia, la policía y ambulancias y una persona se me acercó y me contó que habían encontrado abandonado al bebé en el atrio" y añadió: "Fue muy conmocionante, más un Jueves Santo, con el templo lleno. Toda la comunidad quedó tocada por esta situación".
"Una chica dejó al bebé adentro del templo, bien cambiadito, abrigado", relató Pratti, quien aprovechó que para darle la bendición al pequeño antes de que fuera trasladado por el personal del Sies al Centenario, y reflexionó: "Qué le habrá pasado a esta madre para tomar esa decisión, es una lástima que no nos haya tiempo de poder hablar con ella, podríamos haberle brindado ayuda". (La Capital)