Barberán explicó que el jueves los trabajadores se reunieron en asamblea para analizar una nueva propuesta del Ejecutivo municipal, que les planteó incrementar en un 4 por ciento el sueldo básico. Eso se sumó al bono de 850 pesos, en negro y por única vez, que se les ofreció el miércoles y que los empleados ya habían rechazado y considerado irrisorio.
La asamblea consideró insuficiente una suba del 4 por ciento, y pusieron un piso de 1000 pesos para la bonificación de fin de año. Por tanto, volvieron a rechazar la propuesta y ratificaron el paro.
Además, definieron una medida de fuerza en suspenso para la semana que viene, que se concretaría el jueves y viernes. Barberán señaló que el reclamo lleva largo tiempo ya. En agosto le anticipamos la situación al Gobierno municipal; en septiembre le hicimos el pedido formal, del 17 por ciento de incremento salarial y un bono. En octubre se lo ratificamos, recordó al respecto. Y agregó: Ellos se han demorado con la respuesta, son muy lentos para tomar decisiones.
De todos modos, dijo a APF que esperan que antes del jueves próximo vuelvan a ser convocados y tener una nueva propuesta. Hoy no creo que se arrimen a ofrecer nada, pero nosotros estamos dispuestos a dialogar, subrayó.
Guardias mínimas
Por otro lado, Barberán indicó que la Municipalidad está trabajando con guardias mínimas.
Por ejemplo, señaló: Permitimos que la basura se junte entre las 3 y las 8 de la mañana. Por una cuestión de salubridad, porque después salen recién el domingo.
También contó que el sindicato autorizó a otro grupo de municipales a repartir agua en barrios a los que no llega el agua potable. Pero remarcó que todas las otras áreas están paradas.