Roberto Solís es hermano de Gissella afirmó que todavía no tienen novedades en torno a la búsqueda. "Estamos igual que ayer", señaló.
Sobre la relación que mantenían Gissella y Abel, Roberto contó que comenzaron a salir "hace unos seis años. Durante los primeros tres años de relación este muchacho hace una doble vida, hasta que mi hermana se da cuenta. Ahí empiezan los problemas entre ellos. Mi hermana le planteaba 'o estás acá o estás allá", en referencia a la familia compuesta por una esposa y dos hijos que el hombre tenía en Lobería.
"Tuvieron muchas fechas límites, que sí, que no. Estuvieron separados varios meses, pero siempre volvían. Este 31 de diciembre habían puesto fecha límite, pero esa charla se postergó", señaló Roberto, que agrega que Casimiro tenía radicado su domicilio en la casa de Gissella, pero a la vez se quedaba con su familia. "Era como que triangulaba los lugares donde se quedaba, entre el departamento de la hija en La Plata, porque estudia en la universidad, la casa de mi hermana en Berisso y la casa de Lobería", agregó. Precisamente, entre Casimiro y Gissella estaba pendiente esa charla definitoria en torno a la relación. "Sabíamos que iba a existir esa charla definitoria. Pero por nuestra cabeza nunca se nos pasó que (su desaparición) pudiera ser por un tema de violencia. Mi hermana nunca manifestó que fuera agresivo", señaló Roberto.
Sobre el trato que el resto de la familia mantenía con Casimiro, el hermano de Gissella dijo que debido a toda esta situación "de nuestra parte era poco el trato con él, porque al enterarnos que tenía otra familia se generó una distancia, también con mi hermana. Con él no era un trato fluido ni normal", reconoció. "Nosotros no estábamos de acuerdo con esa relación", añadió.
En cuanto al último contacto que tuvieron con Casimiro, Roberto explicó que el miércoles, al no saber nada de ella, se comunicaron con él. Casimiro dijo entonces que el miércoles a las 8.30 de la mañana había salido de la casa de Gissella para dirigirse a su trabajo y fichar luego de "una discusión muy fuerte". Luego el hombre le dijo a la familia regresó a la casa de Gissella "para seguir la charla", pero que la odontóloga "no le abrió más la puerta", señaló Roberto, en base a los dichos de Casimiro.
Casimiro se suicidó en un hotel céntrico de la ciudad de La Plata cuando llegaron efectivos policiales y se identificaron. En su poder tenía una citación judicial para declarar en el marco de la desaparición de Gissella. La búsqueda de la odontóloga continúa.