De inmediato, Israel advirtió que no pondrá fin a la guerra contra Hamas hasta que el grupo palestino libere a todos los rehenes en su poder. “No tenemos derecho moral a detener la guerra mientras siga habiendo rehenes en Gaza”, dijo el ministro de Defensa, Yoav Gallant.
El pedido de cese el fuego inmediato había sido bloqueado en varias ocasiones por Estados Unidos, que hoy finalmente se abstuvo, desatando una crisis con su aliado israelí.
Descontento por la posición de la Casa Blanca, Israel canceló la visita de una delegación que debía viajar a Washington y estimó que la abstención de Estados Unidos perjudica su ofensiva contra Hamas y los esfuerzos para liberar a los rehenes en manos del movimiento islamista.
“Se trata de un claro retroceso en comparación a la posición constante de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad desde el inicio de la guerra”, subrayó un comunicado de la oficina del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu. (TN)