Después de arrasar Bahamas y de desplazarse por la costa atlántica de Estados Unidos, Dorian entró en el continente con menos fuerza.
Reducido a "ciclón postropical muy intenso" por el centro canadiense de huracanes, las autoridades aún consideran que la tormenta sigue siendo peligrosa a causa de la fuerza de sus vientos.
El huracán, de grado 5 en su paso por Bahamas, fue devastador para el archipiélago que tras más de 40 horas, dejó hasta el momento un saldo de 43 muertos y más de mil desaparecidos. Se espera que la cifra de muertos vaya en aumento consideramente en las próximas horas, a medida que avancen las tareas de rescate.