Durante le programa Intrusos explicó: "Es verdad que Guido la venía remando hace cuatro años. Cuando yo estaba en el Bailando, él me mandaba capturas y me decía que iba (a buscarme) en auto. Tengo las capturas que él me mandaba de haberme votado y todo".
"Él me llamaba para que no me quede dormida y entrenarme de siete a ocho de la mañana. Así empezó a llamarme a las seis de la mañana. Él nunca se me tiró? Yo le decía a (mi amiga) Angie: 'Guido me encanta, pero él no hace nada'. A mí me costaba el hecho de enamorarme. Pensé que no me iba a enamorar nunca más", continuó.
Entonces, cuando Jorge Rial le preguntó si estaba enamorada, Sol remató: "Lo amo; me casaría y tendría hijos". Y continuó: "Algunos días que entrenábamos a la noche me decía de ir a cenar, todos chivados. Un asco tremendo. Él me contaba de cuánto había crecio con los gimnasios, y bla. Nos llevábamos muy bien. Empezamos a salir, pero nada. Hasta que un día me invitó a cenar a (un restaurante a puertas cerradas), yo no no sabía ni que existían en esos lugares, porque era como una casa donde estábamos nosotros y tres parejitas más. Pensé que era un lugar lleno de gatos (sic), que la gente iba a gatear. Ahí me preguntó a mí qué onda, porque me dijo que a él le pasaban muchas cosas conmigo. Todo sin siquiera haber chapado. Le dije que había conocido a alguien y que no había terminado la relación. A él se le transformó la cara. . . Después de ahí me llevó a mi casa y chapamos".
Qué pasa en la intimidad
Más tarde, Gonzalo Vázquez acotó: "Guido dijo que hace dos semanas que llevaba tu ritmo y no podía más". Entre risas, todos creyeron que el empresario se refería al sexo, pero Sol Pérez lo negó: "Uno de los temas que más charlamos es sobre sexo, porque me dice que no puede entender. Pasa que llego cansada, literal. Y yo le digo que a mí me gusta a la mañana, pero él me dice que a la mañana no funciona. Entonces. . .".
De todas formas, al final Sol explicitó cuál es su límite a la hora de ceder en su noviazgo con Guido Mazzoni: "No sería capaz de dejar de trabajar los fines de semana para estar con él. Yo soy súper independiente. Lo bueno es que él puede dejar de trabajar y acompañarme".