"El Vestidor" es una obra emblemática, la realizaron un año en Buenos Aires y ahora la realizan en gira nacional.
Arturo Puig describió al teatro de Paraná como "una maravilla". Jorge Marrale, por su parte contó: "Ya he venido muchas veces a este teatro, cada vez que uno llega, se conecta con este espacio. Es muy generoso este lugar y creo que es acorde a la pieza que estamos haciendo".
"Lo que cuenta la pieza es el avatar de una compañía de teatro shakesperiana de mediados de la segunda guerra mundial, con lo cual, están haciendo gira como nosotros. Es un momento de la historia muy duro, en especial para esta compañía y para este actor y El Vestidor. Este actor que está un poquito grande, no está respondiendo bien con la salud y el peligro es si se va a hacer o no la función", definió en líneas generales, sobre la obra.
Marrale caracterizó como "fantástico" el poder actuar con Puig. "Nos conocemos desde hace muchísimo tiempo. Hicimos televisión hace mucho tiempo atrás y la vida nos juntó para hacer teatro, con `Nuestras mujeres` y ahora con `El Vestidor`. Se ve que inauguramos un periodo teatral los dos, que veremos si continúa", mencionó el actor.
Por su parte, Puig aseveró en una cálida nota con Elonce TV: "Con Jorge me siento muy seguro. El actor en el escenario tiene que tener esa confianza y recibir la generosidad del otro, esto es lo que sucede con Jorge. Uno trabaja muy tranquilo, porque sabe que del otro lado va a venir una buena respuesta".
"El teatro se completa con el público, respiramos al mismo tiempo que lo hace el público"
Al ser consultado, el actor que protagonizó uno de los éxitos más grandes de la televisión argentina, `Grande Pá` y hoy protagoniza "El Vestidor" expresó que el teatro y la televisión son distintos". En este sentido apuntó: "Se trabaja de otra manera, con otros tiempos, por eso el teatro es maravilloso. La noche de la presentación de la obra es única para el público y para nosotros también. El teatro se completa con el público, respiramos al mismo tiempo que lo hace el público. Las funciones, aun diciendo la letra igual, son diferentes. Eso es lo maravilloso que tiene el teatro, que no tiene la televisión o el cine, porque en estos formatos uno puede cortar, se va editando, etc. Creo también que el teatro es el único arte donde muestra al ser humano de cuerpo entero. La pintura puede ser la cara, una mano, la TV son los primeros planos. En el teatro nos ven desde el pelo hasta los pies. También cuando baja el ángel, baja para el público y para nosotros".Marrale, puntualizó que si hay algo que "con el paso del tiempo, sigue manteniendo su esencia, ese es el teatro". Al respecto, definió: "Este teatro es del siglo XIX, pueden haber cambiado las butacas, las luces, hay una nueva tecnología en lo que es el panel para manejar sonido y luces, pero acá se va a seguir juntando la gente, y acá vamos a estar los actores; eso no se ha modificado".
Puig manifestó que el público "nos da satisfacciones grandes, como la de saber que uno sigue vigente. El público en general es muy cariñoso con nosotros. Estamos muy contentos".
Respecto de "los nervios del detrás de la escena, previos a salir", estos experimentados actores, dicen "sentirlos" antes de cada función. "Sobre todo, mucho más ahora, haciendo una gira: cambiamos de escenario y de plateas, de teatro, es muy distinto, uno está nervioso", manifestó Puig. Marrale asintió.
Consultado respecto a los personajes que ha "actuado" Puig, indicó que "De recuerdos, tengo muchos. La mayoría de los personajes que he hecho son como hijos míos, los quiero mucho, no podría elegir uno en particular".
Asimismo Marrale realizó una reflexión respecto al tema. "Hace mucho tiempo atrás, el malo tenía como un registro, la malicia estaba registrada de una manera. Hoy me parece que está muy en contacto con nosotros; la malicia y otros aspectos más oscuros. Al tener tantas referencias vinculadas a eso, lamentablemente, cuando uno las tiene que representar o accionar uno de esos personajes, debe concentrarse muy bien sobre qué es lo que va a y hacia donde tiene que apuntar. Antes, los muchachitos eran los buenos y héroes; hoy por hoy, uno observa como se ha desarrollado el tema de `vamos a seguir al maldito, a ver qué hace`. Son los tiempos que corren".
